Este miércoles, minutos antes de salir al aire, los protagonistas de LAM (América) vivieron un momento de tensión por una fuerte discusión entre Fernanda Iglesias y Cinthia Fernández, que siguen alimentando su enemistad ya declarada.
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A raíz de un cambio que dispuso la producción del programa, la periodista se enteró que habían modificado su lugar en el panel para ubicar allí a la bailarina, situación que no le cayó para nada bien a su compañera.
Según contó Pepe Ochoa en Bondi Live, Iglesias se quejó con la producción "a los gritos en los camarines" y amenazó con irse a su casa si no modificaban los lugares.
"Ayer eran 7 angelitas. Las 6 oficiales y Cinthia. Una productora le indica el nuevo orden: Marcela Feudale, Nazarena, Cinthia y Fernanda. Fernanda se entera y entra a los gritos a los camarines. Le dijo a la productora: 'modifican esto o yo me voy a mi casa'", detalló Ochoa.
"Fernanda le dijo a la productora que Matilda no tenía problemas en cambiarse de silla. Cinthia de pasa del lado izquierdo del estudio al derecho y a Matilda la corren un lugar. Pero Matilda se calienta por era una mentira de Fernanda y decía que le preocupaba que donde la iban a sentar no había buena luz", añadió el periodista.
Finalmente, Cinthia se cambió de lugar, pero expuso al aire que las cosas no estuvieron bien en los camarines. "Hay gente que lloró.... que se encaprichó", deslizó la bailarina, en referencia a la pelea con Fernanda en camarines.
Al día siguiente, Cinthia no pudo estar en el estudio, pero habló por una videollamada con Ángel de Brito, en la que mostró todo su enojo por lo que había pasado fuera del aire el otro día. “¿Estás enojada conmigo?”, preguntó el conductor. “No, no estoy enojada con vos. Molesta sí”, devolvió.
“¿Vos tenías problema en sentarte al lado de Fernanda?”, consultó el periodista. “Cero. Imaginate que no me la fumo y me la llevé en el auto a la fiesta de LAM porque me dio lástima. Yo no soy una persona infantil. La llevé en mi auto y no la soporto”, lanzó, sin filtro, frente a la sonrisa incómoda de Iglesias.
Luego, Cinthia trató de “quejosa y mala compañera” a su colega. “Yo me senté en todas las sillas. Llegó y digo dónde me siento. (...) Ella no entiende el juego y tampoco entiende cómo es la dinámica. Nadie es dueño de ninguna silla ahí”, remarcó.
Entonces, la bailarina fue contundente en contra de su compañera. “Un lugar no hace a mi persona o el papel o el personaje. Me parece que ella tendría que ser un poco más segura. Estar en el medio o en la punta es cualquiera, digamos. En LAM cualquier persona está en cualquier lado. Yo empecé como reemplazo de todas y después quedé fija. Si ella no lo entiende, es inseguridad de ella”, remató, ante el silencio de Iglesias que solo observaba cómo hablaba su colega.