Las altas temperaturas han azotado a los argentinos y argentinas en el último tiempo y parecen no dar tregua. A pesar de alguna que otra lluvia entremedio del calor, todo parece indicar que se viene un verano de los más difíciles de aguantar.
Tal es así que una ciudad argentina llegó a ser la segunda más calurosa del mundo según un reciente informen del sistema internacional de la Organización Meteorológica Mundial, que compartió el ranking de lugares con temperaturas más altas del mundo.
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Se trata de la localidad de Comodoro Rivadavia, en la provincia de Chubut, que alcanzó los 46,2° grados reales y se quedó con el segundo puesto, destronando a otra ciudad argentina, la de Santiago del Estero. Solamente fue superada por Marble Bar, una localidad en Australia.
Por otro lado, las máximas alcanzadas en Las Lomitas, provincia de Formosa, con 44,5°C y en Orán, en Salta, con 43,9°C, le otorgaron respectivamente el noveno y décimo puesto a dichas ciudades.
Desde el Servicio Meteorológico Nacional argentino informaron que el viento del Río de la Plata jugará “un rol importante” para mermar con esta ola de calor en el Área Metropolitana de Buenos Aires.
A pesar de que habrá “alivios puntuales” caracterizados por brisas, nubosidad o incluso pequeños chaparrones, indicaron que estos serán momentáneos y que posteriormente continuarán las altas temperaturas.
Cuáles son las recomendaciones ante la ola de calor
Con máximas que superas en algunas ciudades los 50°, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó que las altas temperaturas que se advierten en casi todo el territorio nacional son consecuencia de “una masa de aire muy cálida que se encuentra ocupando gran parte del país”. Es por ello que los especialistas de la cartera sanitaria emitieron una serie de recomendaciones para evitar problemas de salud.
La temperatura de gran parte del país superará fácilmente los 35°C, un fenómeno que puede acarrear golpes de calor, especialmente en niños, niñas y adultos mayores. Es por eso que los especialistas recomiendan prestar atención a quienes pueden estar más vulnerables y tomar medidas preventivas.
Al respecto, Federico Paruelo, director de Niñez y Adolescencia del ministerio de Salud aconsejó “aumentar el consumo de agua, evitar realizar actividades físicas y la exposición directa al sol de 10 a 16, y siempre utilizar protección solar y gorro. También se recomienda vestir ropa de algodón y de colores claros”.
En el caso de los más chicos, Paruelo señala que “no hay que esperar a que pidan agua, sino que hay que ofrecerles continuamente líquidos, como jugos naturales, agua potable, o en caso de lactancia, amamantar con más frecuencia”.
La alimentación es otra pauta importante a seguir, además de preferir alimentos frescos y saludables, hay que mantener bien refrigerados los que se puedan echar a perder; y desechar los alimentos perecederos (incluidos la carne, el pollo, el pescado, los huevos y las sobras) que hayan estado por 2 horas o más fuera del frío.
A su vez, Paruelo recomendó evitar bebidas alcohólicas, con cafeína, con azúcar en exceso, muy frías o muy calientes; incorporar frutas y verduras a tu alimentación y evitar las comidas abundantes.
