La perdida del poder adquisitivo de los argentinos, que se enfrentan a una feroz inflación y un costo de vida superlativamente superior a los ingresos familiares, comenzaron a generar un efecto revote en el sector industrial que, ante la caída de las ventas, comienzan a tomar medidas drásticas para contrarrestar las consecuencias negativas.
En las últimas horas, se la empresa Topper Argentina, cuya fabrica está radicada en la provincia de Tucumán, comunicó el cese de contratación de al menos 85 empleados, acusando una "brutal caída de las ventas". El rubro textil, de indumentaria y calzado atraviesan tiempos de derrumbe en las ventas, y decisiones similares se dieron también en provincias como Tierra del Fuego y la zona cordillerana, donde pequeñas y medianas empresas están en alerta ante un escenario que consideran que podría empeorar.
Así mismo, desde los sindicatos del sector, prevén que los despidos se multiplicarán en los próximos meses. "El panorama es complejo. El golpe que estamos teniendo toda la clase trabajadora viene de la mano del Gobierno nacional. La inflación nos está destruyendo los bolsillos", declaró el dirigente gremial. Jorge Fugaracho.
En el mismo sentido se expresó el presidente de la Cámara de la Industria del Calzado (CIC), Horacio Moschetto, quien señaló que la industria sufrió una caída de ventas de entre 35 y 40% en enero. Vale remarcar que el sector del Calzado y la indumentaria, se sostienen principalmente por las ventas en el mercado interno.
La determinación de la Compañía radicada en Tucumán, se suma al anuncio de la firma Acindar, sobre la paralización en la producción de acero en sus cuatro plantas en Argentina. La siderúrgica, comunicó que la decisión responde a la crisis económica que generó una disminución significativa de las ventas, estimada entre un 35% y un 40%.
Despidos masivos en Topper
A comienzos de la última semana de febrero, la compañía Topper (ex Alpargatas), ubicada en la localidad tucumana de Aguilares, convocó a 85 de sus empleados abocados a la fabricación de calzados, para comunicarles sobe el cese de sus contrataciones. Se trata de una de las fábricas de zapatillas más grandes del país que desde el año 2019 es propiedad del empresario brasilero Carlos Wizard Martins.
La empresa cuenta con unos 1000 trabajadoras y trabajadores directos. El recorte de personal, tomó por sorpresa a los empleados y según la Unión de Trabajadores de la Industria del Calzado (Ucitra), desde la empresa les comunicaron que la decisión responde a la "brutal caída de las ventas" que los obligó a tomar una determinación como "último recurso".
De acuerdo a información aportada por la prensa tucumana, la fabrica se caracteriza por por cambiar permanentemente de personal y es conocida por la costumbre de no permitir que los obreros tengan antigüedad. Los últimos despidos efectuados fueron sobre empleados que llevaban menos de un año trabajando para la firma.
"No hemos podido ni sacar nuestras pertenencias"
La frase pertenece a una de las empleadas afectadas por la drástica medida que adopto la empresa ante la crisis que vive el sector. Así mismo, Marcela Rodríguez, contó que la noticia la tomó por sorpresa: "Nos pusimos felices porque íbamos a cumplir un año y pensamos que nos iban a hacer firmar contrato", aseguró y finalmente lamentó: "Pero nos dejaron sin laburo".
En diálogo con AM750, Marcela afirmó que de los 85 empleados despedidos, 80 son mujeres y habló del desamparo que viven en estos momentos, ya que nadie se comunicó con ellos. "Todas mis compañeras están destruidas. No hemos podido ni sacar nuestras pertenencias. Hemos tenido que esperar en la puerta una hora y todas las chicas lloraban desconsoladamente, es injusto cómo nos han corrido", remarcó.
