En una decisión judicial muy controvertida, el magistrado titular del Juzgado Penal Juvenil 2 de Mar del Plata, Néstor Salas, haciendo caso omiso de jurisdicción y competencia, prohibió el uso del trigo transgénico en todo el territorio bonaerense al hacer lugar a una medida cautelar solicitada por productores agroecológicos y organizaciones socioambientales.
De acuerdo al fallo emitido por Salas, se suspendió temporalmente “el uso y liberación a cielo abierto de la variedad exótica de trigo modificado genéticamente de la empresa Bioceres hasta tanto se implemente la Comisión de Biotecnología y Bioseguridad Agropecuaria a los efectos de elaborar un informe con sus recomendaciones respecto a la introducción y liberación de de material transgénico y sus efectos en los recursos naturales, la salud, la producción y la comercialización”.
En concreto, el juez hace mención al trigo transgénico HB4, una variedad desarrollada por la empresa Bioceres en conjunto con la Universidad Nacional del Litoral y el INTA, que resulta mucho más resistente a la sequìa y a distintos herbicidas, entre ellos el glifosinato de amonio. El Gobierno nacional aprobó recientemente su comercialización local, pero la empresa Bioceres, perteneciente entre otrs accionistas al empresario Gustavo Grobocopatel, aún no había comenzado su venta a nivel local.
La solicitud de medida cautelar fue presentada por 37 personas de diversas organizaciones y localidades bonaerenses, representados por el abogado marplatense Lucas Landivar. En la medida, las distintas entidades ambientales argumentaron la contaminación que podría provocar al cultivo convencional, la falta de consenso social, los riesgos para la salud y el ambiente, entre otros aspectos.
Según el texto del fallo de Salas, pese a no ser experto en la materia, afirma que “el trigo transgénico puede generar un daño grave e irreversible en la salud de la población y en el ambiente”.
El fallo es polémico además porque la competencia en eventos biotecnológicos es nacional. Además afirman que el fallo está caído por apelación de autoridades de la provincia de Buenos Aires y por la falta de competencia de Salas en el caso.
La utilización de la variedad HB4, ya fue aprobada por autoridades de China, Brasil, Colombia, Nueva Zelanda, Australia y recientemente la exigente Food and Drugs Administration (FDA) algo así como la ANMAT estadounidense, aprobó el uso de la variedad de trigo.
La posición del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca
Recientemente, el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Julián Domínguez, habló sobre esta variedad de trigo transgénico, cuando se aprobó su comercialización en nuestro país.
Domínguez defendió la decisión oficial y subrayó: “el HB4 permite a las zonas de menor rendimiento y de más inestabilidad climática poder garantizar su rendimiento, y no podemos privar al productor de esto por inseguridad en el mercado”.
Luego remarcó: “hay que apostar por la tecnología, por la biotecnología, el futuro, la revolución del campo argentino va por la biotecnología y la genética y ese partido hay que jugarlo con el INTA, con nuestros técnicos y científicos tenemos que tener confianza con lo que estamos haciendo”.
“Estoy convencido de que el cambio climático vino para quedarse y el escenario de los negocios de la Argentina y del mundo van por la biotecnología, por el conocimiento”, concluyó.