El móvil de Telefé se encontraba en el predio Casa Chica de Entre Ríos, donde en el día de ayer la justicia de Paraná falló en favor de Luis Miguel Etchevehere y sus hermanos y en contra de Dolores y los trabajadores del Proyecto Artigas, forzando el desalojo y la posterior detenció de la misma.
Mientras el movilero Guillermo le realizaba una nota Juan Diego, el menor de los hermanos Etchevehere, el mismo comentaba el estado de la vivienda: "Encontramos revuelto los cajones, las sábanas usadas. Ropa interior de las personas que estuvieron acá usurpando nuestras casas. Papeles por todos lados y las revistas revueltas".
Tras su declaración, la periodista Cristina Pérez interfirió en la conversación y le pidió al movilero que le comentara al entrevistado si existía la posibilidad de dejar "una evidencia" al mostrar las imágenes dentro del hogar.
Sin embargo, al consultar, la respuesta de Echevehere no fue la esperada: "Estamos recién tratando de interpretar nosotros y tratando de verlas. Nos gustaría esperar un tiempo para poder acomodar todo esto y después sin ningún lugar a dudas, invitarlos algún día para tomar imágenes, pero desde otro lugar, no de este lugar donde uno se siente violentado".
