Máximo Thomsen, el principal acusado por el crimen de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell, se desmayó inmediatamente tras escuchar que fue condenado a cadena perpetua por las patadas mortales.
El rugbier se desvaneció y debió ser asistido por personal médico mientras los jueces llamaron a una especie de cuarto intermedio improvisado para que el joven pueda ser atendido en medio de la sentencia.
Thomsen deberá cumplir una cadena perpetua junto a Ciro Pertossi, Enzo Comelli, Matías Benicelli y Luciano Pertossi, los otros cuatro partícipes que recibieron la misma pena por el crimen.
Durante la transmisión en vivo se puso apreciar el momento en el que el joven se desvanece en su silla y es recostado por el personal de seguridad que acompaña a los rugbiers, a la espera de la atención médica.
En un primero momento, un tumulto comenzó a verse sobre el sector de los rugbiers y segundos más tarde pudo verse a Thomsen caído, prácticamente desmayado, sobre la silla que ocupó durante todas las audiencias.
De fondo se escucharon los gritos de la madre de Thomsen pidiendo asistencia para su hijo ante la falta de intervención mientras el tribunal leía las condenas de los ocho acusados por el asesinato de Fernando.
En este contexto, el abogado defensor Fernando Burlando habló con los medios de comunicación una vez terminado el veredicto y al ser consultado por el desmayo de Thomsen, señaló: “¿Se desvaneció? Bueno, así le pegaron a Fernando, desmayado”.
También aseguró que “gracias a los medios”, la justicia “se puso los pantalones” en el caso, en referencia a los gritos de la madre de Thomsen, que apuntó contra los medios por la difusión que tuvo el hecho y entendiendo que su hijo podría haber recibido una condena menor si no se hubiese mediatizado.
Por otro lado, el letrado anticipó que van a apelar la decisión del tribunal para que Viollaz, Cinalli y Lucas Pertossi sean condenados a perpetua como los otros cinco acusados por el asesinato del joven de 18 años en Villa Gesell.
“Vamos a apelar el fallo. Esto recién empieza, una Justicia débil al momento de evaluar sentencia no es Justicia. Entendemos que los tres acusados se vieron beneficiados por una condena de 15 años”, expresó.
Consideró que fueron “beneficiados” por los jueces en un hecho que “fue un plan” entre todos los implicados y que eso “está probado” por la querella y la fiscalía. Además, recordó que había ADN de Blas Cinalli en el cuerpo de Fernando.
“Este tribunal, desde mi punto de vista, tuvo clemencia con tres de los acusados de una manera irracional. Todos merecían un castigo acorde a su crimen”, agregó en consonancia con lo que viene pidiendo desde que arrancó el juicio.
