Este miércoles se subastó la mítica camiseta azul de Diego Maradona, con la que marcó los dos goles contra Inglaterra en los cuartos de final del Mundial de México 1986 y escribió su nombre en la historia del fútbol mundial: la "Mano de Dios" y el "Gol del Siglo".
El coleccionista argentino Mariano Ordás viajo hasta Londres con el objetivo de quedarse con la reliquia, pero apenas segundos lo separaron de uno de sus máximos sueños: “Faltaban 17 segundos y éramos la mejor oferta”, expresó totalmente emocionado por el desenlace.
Sin embargo, “llegó una oferta de Medio Oriente a último momento y nos sacó la ilusión. Estamos muy tristes esta camiseta era el sable de San Martín para los futboleros. Traer la camiseta tendría que haber sido una causa nacional”, relató durante una entrevista con Luis Novaresio.
“Pensé que la ganábamos porque detrás de mí hay mucha gente que acompañó esta cruzada”, agregó. Las 5,5 millones de libras no fueron suficientes para ganar la subasta y la cifra que se llevó la camiseta fue de 7 millones más impuestos. “Era imposible ya”, aclaró con tristeza.