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Eduardo Feinmann luego de contraer Coronavirus: "Estoy roto, pasé un momento horrible"

El periodista, quien fomentaba a que se hagan marchas y manifestaciones anticuarentena y en contra del Gobierno, contó al aire de Radio Rivadavia, su experiencia tras ser positivo de Coronavirus.
Lunes, 07 de septiembre de 2020 a las 15 47,

Por Redacción

Lunes, 07 de septiembre de 2020 a las 15 47,

El periodista y abogado, Eduardo Feinmann, narró el duro momento por el cual tuvo que pasar mientras se encontraba internado y aislado, tras ser diagnosticado como caso positivo del nuevo Coronavirus Covid-19.

El conductor de A24, quien anteriormente manifestaba su apoyo con las movilizaciones sociales en contra del Gobierno y marchas anticuarentena, cambió de discurso luego de toparse con el virus y pasar casi un mes internado ,debido a que su situación se agravó, en completo aislamiento y sin ver a sus familiares.

"Bien es una forma de decir. Roto, roto. Pasé un momento horrible en esa semana que estuve internado, completamente solo, tirado en una cama" ,respondió Feinmann, luego de ser consultado sobre su estado de salud actual, ya dado de alta de la enfermedad.

Luego, destacó la importancia del personal de salud, algo que resulta contradictorio por alguien que anteriormente defendía la idea de que no exista el aislamiento social, preventivo y obligatorio: "Con la gran ayuda obviamente de los médicos, las enfermeras, el personal de salud por el que hay que sacarse el sombrero por el laburo que hacen, tanto en hospitales públicos como privados, que es impresionante. La atención era hora a hora,era una cosa muy impresionante".

Totalmente shockeado por la situación vivida, el periodista contó que no pudo ver a nadie "más que médicos, enfermeros y personal de salud, a quienes no les vi la cara. Es una enfermedad muy tremenda, porque ni siquiera le ves la cara al médico que te atiende. Están totalmente cubiertos, con trajes de astronauta, con máscara, con barbijo, anteojos. Apenas se les ve los ojos. Es muy impersonal todo, no hay contacto físico con una persona y cando entran te ponés el barbijo para no contagiarlos. Es muy tremendo".

Por último, Feinmann agregó: " La cabeza te juega en contra. Tener el oxígeno las 24 horas del día, tener un coso de plástico enchufado en la nariz, donde sabés que si no tenés eso no respirás. Es horrible. Más cuando vos fuiste el que comunicaste lo que pasaba durante meses. Entonces, de repente uno estar en la misma cama que uno relató que otros estuvieron en esas camas es muy fuerte"