Durante el mes de febrero, la variante Ómicron de coronavirus (linajes B.1.1.529 y BA) se expandió a lo largo y a lo ancho del mundo y representa la cepa dominante en todo el planeta.
A partir de este mes, se detectó otra variante de Ómicron, el linaje BA.2 que se registró en varios países como Reino Unido y Dinamarca. Los datos son realmente preocupantes: BA.2 ha comenzado a superar a BA.13, lo que sugiere que es más transmisible que BA.
Investigadores japoneses concluyeron en un escrito que la subvariante es más contagiosa y, al igual que Ómicron, el patógeno evade la inmunidad de la vacuna contra el covid-19.
Los investigadores, que incluyen colegas del Instituto de Ciencias Médicas de la Universidad de Tokio, indicaron que BA.2 tiene una carga viral más alta en las células epiteliales nasales. De este modo, sugieren que la variante nueva amenaza al mundo dada su transmisibilidad e infectividad.
La semana pasada, la Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo que si bien BA.2 es más transmisible que BA.1, la subvariante no es más grave. “Entre todas las subvariantes, BA.2 es más transmisible que BA.1. Sin embargo, no hay diferencia en términos de gravedad”.