El Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI) emitió un comunicado este miércoles en el que confirma la existencia de violencia de género dentro del Grupo América y dictaminó que el periodista Antonio Laje tuvo conductas violentas, cínicas y perversas. De este modo, el organismo ratificó el nombrado "Informe América" elaborado por Periodistas Argentinas, que recogió 12 declaraciones de víctimas de violencia laboral y de género por parte del conductor.
En rigor, el texto que lleva la firma de Demián Zeyat, señala que identificaron "conductas discriminatorias por parte del periodista Antonio Laje y del multimedio Grupo América en el cual se desempeña, dado que mediante la omisión y el desentendimiento permitió que ocurran los hechos de violencia de género denunciados".
El informe también expone el cruel método de producción de noticias del multimedio Grupo América con base en 12 testimonios que dan cuenta del maltrato sistemático recibido durante su trabajo en el medio. "No solo la conducta del Sr. Laje resulta discriminatoria sino también la de la empresa que rige el medio en el cual se desempeña, que mediante la omisión y el desentendimiento permitió los hechos de violencia de género denunciados", establece el documento de la entidad presidida por Victoria Donda.
Las denuncias contra Laje
En el escrito firmado por Zeyat, director de Asistencia a la víctima, señala que "Laje se victimizó y denunció una 'operación' para destruirlo. Más allá del egotismo del Sr. Laje, que al parecer se considera lo suficientemente importante e influyente como para que se instalen operaciones en su contra, con sólo apreciar las declaraciones de las mujeres implicadas, sus tareas y sobre todo las consecuencias que tuvieron en sus trabajos, basta para descartar la falsa 'operación' argüida por Laje".
En otro pasaje, el organismo que depende del Estado hace hincapié en la "perversión" en la que incurrieron la empresa y el periodista al negar las situaciones de maltrato denunciadas por las víctimas. "La defensa del Sr. Laje consistió en definir a esta situación no como maltrato, sino como exigencia. Más allá del nombre que le quiera poner, los hechos encuadran sin lugar a dudas en todas las definiciones de violencia contra la mujer que establece la normativa internacional y nacional", agrega el documento.
El Inadi vs. Grupo América
El Inadi también cuestionó el accionar de la empresa multimedial frente a las denuncias y el poco interés demostrado por llegar a una resolución para las víctimas, al priorizar defender a Laje. "Respecto al papel y responsabilidad de los dueños y autoridades del medio implicado, debe decirse que su actitud ante la situación resultó reaccionaria, anacrónica y a todas las luces insuficiente. En relación a su intervención en este expediente, si bien puede entenderse el derecho a la defensa que toda persona física y jurídica tiene, la actitud aséptica y tecnicista evidencia en las presentes actuaciones un desinterés absoluto por la violencia engendrada contra las mujeres en el medio que presiden", añadieron desde el instituto.
El organismo, además, señala: "El afán de defender a su conductor deja a la empresa en una posición de absoluta complicidad con los graves hechos denunciados y de espaldas a una realidad (el empoderamiento de las mujeres para terminar de una vez con prácticas y conductas violentas contra ellas) que no va a detenerse por más caso omiso que quiera hacerse"
Por último, fundamentaron: "Con su actitud la empresa, además, revictimiza a las mujeres implicadas, ya que la inacción respecto a lo ocurrido, aún ante la presentación de denuncias formales, reafirma la postura tomada al despedir a las trabajadoras que no se sometían a los abusos de Laje, o al permitir su persecución y acoso laboral, sin garantizar los más elementales derechos laborales".