Las cartas documento enviadas por el capacitador canadiense Martin Krajcik, de la organización All Welcome, por el reclamo del pago de U$S 5 mil correspondientes a una capacitación que se acordó en junio de 2022 y se formalizó con un contrato firmado por la gestión de Martín Llaryora como intendente, resultó la punta del iceberg de las irregularidades en el manejo de fondos desde el área Diversidad Sexual de la Municipalidad de Córdoba, y el uso de las ONGs de la diversidad para evitar el control del uso de dinero.
Desde entonces se han sumado testimonios de trabajadores del área sobre la precarización en que desarrollan sus actividades.
La noticia de Krajcik surgió de una investigación exclusiva que el diario La Voz del Interior publicó en marzo del año pasado. El informe dio cuenta que el capacitador canadiense firmó un contrato que mencionaba la cifra en dólares, pero también el equivalente en pesos de esa fecha y ahora reclama la suma en moneda extranjera.
Si bien firmó su contrato con la ONG ‘Cordoba Diversa’, Krajcik reclama al municipio cordobés por haber hecho las tratativas para “brindar una capacitación a la Municipalidad, con funcionarios municipales”, según consignaron a La Voz los consultados de All Welcome.
En la página del municipio se puede leer la información sobre la instancia de formación, que también fue difundida por distintos medios de prensa.
“Entre el 22 y el 23 de junio, la Municipalidad de Córdoba organiza el Primer Simposio Internacional sobre Personas Adultas Mayores LGBTIQ+. Las jornadas, que se llevarán a cabo en la Casona Municipal, estarán a cargo del canadiense Martin Krajcik”, informa un posteo en el portal municipal.
Polémicas maniobras
¿Por qué en su momento no firmaron con la Municipalidad? Según la nota firmada por los periodistas Virginia Digón y Matias Calderón, la determinación de firmar con una ONG se fundamentó en el objetivo de “evadir controles de parte de la oposición y hacer el procedimiento más simple y de manera más directa”.
De esta manera quedó en evidencia la triangulación de contratos con ONGs que pertenecerían a Franco Bonino, entonces director del área Diversidad Sexual de la Municipalidad de Córdoba durante la gestión de Llaryora.
Según La Izquierda Diario, las organizaciones Córdoba Diversa, Centro Trans Córdoba, Varones Trans, Córdoba sin violencia y Córdoba No Binaria están relacionados con quien dirige el ente municipal de diversidad.
Trabajadores precarizados
Desde entonces han aparecido testimonios de trabajadores temerosos por perder lo poco que tienen, pero hablando de la precariedad de sus trabajos.
“La diversidad en la municipalidad de Córdoba no existe, nos contratan por servidores urbanos, lo cual te están pagando 20 (ahora) 15 para alimentos, estás en una oficina no haces nada, y te mandaban cuando tenían ganas a ‘hacer favores’: a algunos los mandaban a realizar tareas de limpieza en su vivienda, si no realizabas eso te amenazaban”, indica uno de los testimonios de trabajadores del sector recabados por el portal ARGay durante la gestión de Llaryora.
“No es algo rentable para las personas de la comunidad, no es algo estable y los manejos o tratos no son dignos”, comentó quien conoce el área de trabajo de la Diversidad Municipal.
Según información publicada, “92 personas LGTB trabajan actualmente en la Municipalidad pero sin ningún tipo de derecho laboral, ni jubilación, cobertura médica, ni licencias y a la merced del manejo clientelar”. Algunos de los programas utilizados son Servidores Urbanos y los centros de reciclado EcoFem.
