El exjuez de la Corte Suprema, Raúl Zaffaroni, se refirió este jueves a los chats del lawfare sobre el encuentro opositor en Lago Escondido y advirtió que “están rompiendo las reglas del juego democrático”.
“Es difícil describir el estado de ánimo. Desconcertado, anonadado. ¿Qué sensación se puede tener cuando se está viendo que se desequilibra la república?”, expresó el exmagistrado tras ser consultado en dialogo con AM750.
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Zaffaroni señaló que “hay una cuestión política” en el manejo de los jueces, fiscales y funcionarios porteños, en detrimento del correcto funcionamiento del Poder Judicial. “No importan ya los argumentos jurídicos”, sostuvo.
“Se agotaron los caminos jurídicos. ¿Qué va a pasar? Casación está en manos de los mismos jueces que visitaban a Macri, que iban a jugar al pádel. El juez que instruyó la causa tratando de apalabrar a la ‘mina’, así trata a la fiscal. La Corte Suprema indiferente”, considero al hablar de las conversaciones secretas vía Telegram.
Y continuó: “No se sonrojan (la Corte) cuando se apoderan del Consejo de la Magistratura después de años declarando inconstitucional su composición. Tampoco se sonrojan cuando deciden sobre cómo se configuran los bloques del Senado. Se meten a ordenar otro poder del Estado. Son absolutamente incompetentes.”
Sobre este tema, cuando la Corte decidió sobre la composición de los bloques parlamentarios, y en definitiva sobre la conformación del Consejo, Zaffaroni opinó: “El Poder Judicial no puede meterse en el orden interno de los otros poderes del Estado. La Constitución Nacional pasa a ser un papel sin importancia, sucio de letras”.
Sin embargo, aseguró que las amistades opositoras en el Poder Judicial “no son cosas que sorprendan, sino que son cosas que se conocían” aunque se esté consciente de que rompe con el orden democrático y el correcto funcionamiento de las instituciones.
Remarcó que los magistrado involucrado en el escándalos deben ser sometidos a “un jury de enjuiciamiento y destituirlos” de sus cargos, pero que eso “no va a suceder”.
“Las posibilidades del derecho se agotan y acá tiene que entrar la política. La dirigencia política tiene que darse cuenta de que lo que están haciendo es demoler no sólo ya la democracia, sino también la república”, indicó.
Con la mira en una salida de la cuestión, el exjuez pidió por una reforma y consideró: “No podes convocar al pueblo para llorar y decir que no hay posibilidades de nada. Hay que impulsar el proyecto de reforma judicial y hacerlo bandera popular”.
De igual forma, pidió “movilización y proyecto” por parte del oficialismo para intentar frenar el atropello judicial. “Que se ponga las pilas nuestra dirigencia política es importante y que tome consciencia de la gravedad de la situación”, sentenció.