El diputado de cambiemos amenazó con pegarle cuando comenzó a hacerle preguntas incómodas sobre el gobierno.
“No me rompás más las pelotas”, le dijo y lo acusó de ser un periodista “pago para joder”. Luego caminó unos metros y le dijo a otros funcionarios que lo esperaban: “le voy a dar una piña en 30 segundos”, ante lo que el resto intentó calmarlo.
Laura Alonso fue otra de las personalidades más violentas durante la jornada.