Este miércoles, Gabriela Michetti y Laura Alonso fueron denunciadas en los tribunales de Comodoro Py por presunto "tráfico de influencias" a raíz de los mensajes en los que se hizo mención a un perseguido por la Oficina Anticorrupción durante el Gobierno de Macri.
La denuncia se realizó después de que se filtraran audios en los que la exvicepresidenta le pedía a la extitular de la OA que "cese las investigaciones" contra su amigo y colaborador Guillermo Pino.
En la presentación del abogado Alejandro Sánchez Kalbermatten se alude a un posible delito cometido en el marco del artículo 256 BIS del Código Penal, segundo párrafo, que dispone pena para quien "por sí o por persona interpuesta solicitare o recibiere dinero o cualquier otra dádiva o aceptare una promesa directa o indirecta, para hacer valer indebidamente su influencia ante un funcionario público, a fin de que éste haga, retarde o deje de hacer algo relativo a sus funciones".
"El primer audio evidencia la solicitud un tanto coercitiva de la exvicepresidenta, acusando a la exdirectora de ´embocarlo´ con una denuncia y pidiendo su cese", interpretó el abogado.
En la denuncia, que quedó sorteada a cargo de Daniel Rafecas, el abogado citó: "Laura, necesito que te juntes con un amigo mío (por Pino) que está trabajando conmigo, es una persona de mi confianza, lo conozco hace mucho, y lo embocaste en una denuncia. Y encima Clarín lo nombró'".