Mauricio Macri, se encuentra en República Dominicana, donde brindará una charla junto con otros ex presidentes latinoamericanos. Desde allí monitorea la crísis que pareciera no tener fin en la interna del Pro y planifica los pasos a seguir para destrabar los conflictos y comenzar a definir los lineamientos estratégicos del sector opositor.
El exmandatario regresará al país el próximo jueves y ya prepara su agenda. En principio tendrá un encuentro con Federico Angelini, el diputado Nacional asumirá esta semana como jefe del partido en reemplazo de Patricia Bullrich.
Pero la reunión que planea el expresidente, tiene como protagonista al jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta. Luego de conflicto originado tras el anuncio de que los porteños votarán con el sistema de elecciones concurrentes y con diferentes sistemas, Macri expresó su profunda desilusión, y las diferencias entre los principales referentes del espacio, parecerían irreconciliables.
Pero estas diferencias en torno al liderazgo opositor, tiene un punto en común entre ambos: La elección del sucesor de Larreta en la Ciudad. Tanto el Expresidente como el jefe de Gobierno porteño coinciden que habrá un solo candidato del Pro para disputar la interna de Juntos por el Cambio.
El precandidato a presidente del JxC tendría cierta inclinación a las candidaturas de Fernán Quiroz y Soledad Acuña, mientras que Mauricio impulsa fervientemente la candidatura de su primo, Jorge Macri.
En este sentido, desde distintos sectores del macrismo, principalmente Vidal y Bullrich, quienes se manifestaron contra la decisión de desdoblar las elecciones porteñas y criticaron duramente al alcalde porteño, alertan sobre una presunta alianza política entre el jefe de Gobierno y el senador radical, Martín Lousteau.
En medio de este clima y en un intento por incomodar a Larreta, Patricia Bullrich comunicó su pedido de licencia durante 90 días de la presidencia del PRO para dedicarse de lleno a la campaña. En este sentido la exministra de Seguridad declaró “Debemos hacer todos los esfuerzos para separar nítidamente cada institución, dando pasos en un sentido correcto que afiance la República, sin aprovecharnos de los cargos públicos o partidarios”.
Su lugar será ocupado por el actual vicepresidente del partido, Federico Angelini. El diputado Nacional, es hombre de confianza de Mauricio Macri y clave en el armado político de Bullrich. Con su arribo a las presidencia, planea acordar una tregua para que los enfrentamientos no afecten electoralmente al partido, por lo que habría solicitado una reunión con Macri, Larreta, Bullrich y Vidal en las próximas semanas.
Por su parte María Eugenia Vidal, propuso que se bajen todas las candidaturas del Pro, como una forma de alcanzar un acuerdo que permita mantener la unidad de la fuerza. “Creo que el Pro tiene que bajar todas las candidaturas y dar una discusión interna sobre cuáles van a ser las reglas para competir” había declarado la exgobernadora en una entrevista radial.
Desde el entorno del expresidente si bien no se manifestaron ni a favor ni en contra del pedido de Vidal, intentaron tomar distancia. Según trascendió, Macri habría declarado en su entorno que “es un pensamiento de María Eugenia y sus buenas intenciones”.
Por su parte, Rodríguez Larreta, se muestra confiado en base a sus encuestas que lo darían como ganador en las PASO, superando en la interna a Bullrich quien se quedaría con el apoyo del electorado duro del Pro.
