Luego de la reunión que mantuvo el gobierno al mediodía con gobernadores afines al oficialismo, se decidió no acatar al fallo de la Corte Suprema de la Nación que le otorga a la Ciudad de Buenos Aires una taza más alta con respecto a las demás provincias de coparticipación. Allí Alberto Fernández presentó un pedido de revocatoria "in extremis" al 2,95% que le brindó el máximo tribunal.
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A través de un comunicado, el gobierno nacional expresó: "En un fallo inédito, incongruente y de imposible cumplimiento, la Corte Suprema de Justicia de la Nación, sin fundar el modo por el cual construye dicho monto, decide aumentar ese porcentaje al 2,95; es decir, le otorga a la Ciudad de Buenos Aires más de 180 mil millones de pesos adicionales a los que ya percibe".
Y continuó: "En síntesis, en un fallo político, de cara al año electoral, la Corte Suprema pretende sustraerles recursos a todas las provincias para dárselos al jefe de gobierno de la CABA".
La respuesta de Bonelli
En sintonía con el mensaje de la oposición, que hace pocos días tildaron el feriado nacional por el recibimiento de la selección argentina de "anti federal", se sumó a la oleada de críticas a la decisión del gobierno y sus gobernadores de no acatar al fallo y su pedido de distribuir federalmente la recaudación de impuestos.
Esto es algo que por supuesto no le gustó al Jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, que quiere tener un 1% más para una ciudad de lo que perciben provincias enteras como Corrientes, La Pampa, Neuquén, Santa Cruz y Tierra del Fuego.
Marcelo Bonelli brindó su análisis a esta situación y tildó de "autista" a la reacción del gobierno.
