El interbloque en la Legislatura porteña de Juntos por el Cambio buscó de forma traicionera eliminar el impuesto a las tarjetas de crédito y generó el rotundo rechazo de la oposición al proyecto, por lo que los porteños seguirán pagando el tributo.
La medida había sido impulsada por el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y enviada a la Legislatura para su rápida aprobación, o al menos eso tenía en mente el oficialismo de la Ciudad de Buenos Aires.
Sin embargo, un cambio de última hora hizo que Juntos no consiguiera los votos necesarios para aprobar el proyecto. El mismo estaba sujeto al cumplimiento del fallo de la Corte Suprema que le devolvió los fondos de la coparticipación al distrito más rico del país.
Según el proyecto, a pesar de ser aprobado la eliminación del impuesto quedaría en suspenso y a la espera del cumplimiento de lo dispuesto por la Corte. Por este motivo, la oposición consideró que era un “engaño a los porteños”.
La propuesta de Larreta fue modificada en las horas previas a la sesión especial convocada por el oficialismo porteño con el propósito de condicionar la eliminación del impuesto a que la Ciudad perciba dicho coeficiente determinado por el máximo tribunal.
Es decir, no tuvo en cuenta que el presidente Alberto Fernández calificó al falló de “imposible cumplimiento” ya que implicaría ceder a CABA “más de 180 millones de pesos adicionales a los que ya percibe” en detrimento de las demás provincias y la perspectiva federal del Gobierno.
A raíz de este cambio, los bloques del Frente de Todos (FdT) y la Izquierda que componen el arco opositor decidieron modificar su postura previa de acompañar la ley que aliviaría el bolsillo de los porteños.
“El oficialismo pretendía agregar al proyecto una cláusula que dejaba en suspenso la eliminación del impuesto. Si la intención fue modificar el proyecto original para que diga exactamente lo contrario, convalidamos ese engaño a los porteños. No convalidamos esta estafa”, expresaron desde el FdT.
Alberto Fernández le respondió a la Corte por el fallo a favor de la Ciudad
El máximo mandatario de la Nación, Alberto Fernández, salió directo al choque frente a la Corte Suprema de Justicia, luego del fallo otorgado a favor del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires por la coparticipación de los fondos estatales.
Dicho fallo, establece que desde Nación se tendrá que destinar una cantidad exacta de un 2,95% de los fondos coparticipables hacia la Ciudad, lo que beneficia al territorio capitalino en la recaudación de fondos. Por este motivo, el presidente salió a criticar la medida cautelar establecida por la Corte, encabezada por Horacio Rosatti.
"El fallo de la Corte genera una gran desigualdad entre la ciudad mas opulenta del país y el resto", sentenció Alberto Fernández en un acto realizado en la provincia de Formosa, donde realizó la entrega de 476 viviendas junto con el jefe de Gobierno provincial, Gildo Insfrán, y acotó que esta medida "va en contra del federalismo" y trunca las posibilidades "de que cada argentino pueda crecer y desarrollarse donde han nacido".