Este martes, tal como estaba pautado, el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, hizo oficial su renuncia a ese espacio y a la banca que le correspondía en el cuerpo, para asumir funciones como ministro de Economía de la Nación.
Con sentidas palabras, Massa se despidió del Congreso nacional, dejando en su lugar a Cecilia Moreau. El tigrense convocó a construir acuerdos entre el oficialismo y la oposición al asegurar que "la Argentina necesita mas allá de nuestro debate apasionado" que "tengamos la humildad y el coraje para construir consensos y políticas de Estado".
"Hoy termina una etapa y mañana empieza otra", expresó y advirtió a los legisladores que "sepan que desde mañana voy a venir una mil veces a esta casa a buscar que entre todos aquellos que tenemos la convicción y el compromiso de que este sea un país un poquito mejor, podamos más allá de las diferencias darles a los argentinos políticas de Estado".
El insólito pedido de De Loredo
En este marco fue que un legislador radical, Rodrigo De Loredo, perteneciente al interbloque de Juntos por el Cambio, le hizo un insólito pedido a Massa, durante la sesión. "La Argentina está necesitando un plan de estabilización, confianza y decisiones duras. El riesgo de tener un nuevo administrador con decisiones cortoplacistas es grande".
"Por lo que formulo una propuesta muy concreta, que sería una gestualidad que la sociedad tomaría para bien, en esta necesidad de confianza", siguió De Loredo.
"Sería una gestualidad que la sociedad tomaría para bien que esté dispuesto, ex Presidente, a renunciar a toda pretensión de candidatura en 2023. Sería darle una señal a la población argentina", afirmó el diputado radical.
El diputado de la provincia de Córdoba, recibió abucheos de todo tipo, ante su insóltio pedido. "Yo se que para ustedes la política es ganar elecciones, para nosotros es resolver problemas concretos con políticas públicas que aborden los problemas estructurantes del país, y sería una señal que necesita la sociedad para tener la confianza y la previsión que este país necesita"
El diputado radical, terminó haciendo el ridículo en pleno recinto, ante una Cámara en pleno que se encontraba convulsionada por la salida de Massa y la llegada de Cecilia Moreau.
La sesión especial contó con la asistencia de numerosos funcionarios e invitados especiales que observaron la deliberación desde los palcos. Allí se ubicaron la esposa de Massa, Malena Galmarini, y su hijo Tomás: los ministros del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro, y de Transporte, Alexis Guerrera; el titular del Indec Marco Lavagna; el presidente del Ente Nacional de Control y Gestión de la Vía Navegable, Ariel Sujarchuk, los funcionarios bonaerenses Cristina Álvarez Rodríguez y Nicolás Kreplak y la vicegobernadora de Buenos Aires, Verónica Magario.
