La diputada electa en la Legislatura de la provincia de Santa Fe, Amalia Granata, se alejó del partido Unite con el que había logrado su banca y despertó una gran polémica puertas adentro.
La panelista que había conseguido su banca en junio, pero recién en diciembre le tocaría asumir. Asimismo, comunicó su decisión por sus redes sociales y generó un bloque aparte que conformarán sólo ella y su compañera Betina Florito. "En la política se cambian convicciones como si fuera una remera", denunció Granata.
Tras haber conseguido el 10,75% de los votos en los comicios provinciales en junio y de haber sido una de las responsables de dejar a la fuerza Unite en la tercera colocación en Santa Fe, en la que obtuvieron seis bancas, Granata denunció diferencias dentro del espacio y de esta manera dividirá el bloque.
“Desde el primer día tuve el afán de que ese (el de “defender la vida en todas las circunstancias”) sea el camino rector de un bloque que incluyera a los 6 diputados que resultamos elegidos, innumerables muestras de buena voluntad y predisposición al real trabajo en equipo. Lamentablemente, 4 de ellos, no comparten esta visión y han decidido tomar un camino separado”, expresó la militante en contra de la despenalización del aborto en sus redes sociales.
Una de las abanderadas de los pañuelos celestes aseguró que no quiere que “este tipo de problemas propios de la vieja política desenfoque la razón esencial”, y ratificó: “Creemos que hacer política es hacerlo de cara a la gente que nos votó y poniendo antes que cualquier interés personal la causa por la defensa de la vida”.
A su vez, denunció a sus compañeros porque a ellos los eligieron para luchar contra la política "que se hace de espaldas a la gente, en recintos cerrados y no de frente, en la calle y de manera transparente”, y advirtió que “la política está llena de engaños y tentaciones, de falsas promesas y alianzas que se desarman y rearman al igual que se cambian convicciones como si fuera una remera”, sentenció.
