El apuntado como futuro ministro de Infraestructura de la Nación, Guillermo Ferraro, cuestionó la inversión del Estado en la construcción del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner, y aseguró que ninguno de los “que pagamos impuestos” lo utiliza.
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Javier Milei, comenzó su primera semana como presidente electo entre reuniones, contactos con referentes internacionales y definiciones en distintos medios de comunicación, donde va dejando definiciones de cómo se está armando el próximo Gobierno que comenzará sus funciones desde el 10 de diciembre. En el mismo sentido, se expresan en los diferentes medios de comunicación desde su entorno.
Así es que el consultor, que tuvo la responsabilidad de la coordinación nacional de la fiscalización de La Libertad Avanza en la últimas elecciones, y que tendrá a cargo, desde el 10 de diciembre, áreas claves del Estado como Transporte, Obras Públicas, Energía, Minería y Comunicaciones, se manifestó en la misma línea del líder libertario y reafirmó que la obra pública tendrá un modelo “a la chilena” durante la nueva gestión.
El futuro "superministro" de Milei, criticó el gasoducto que se inauguró a mediados de año para transportar gas desde Vaca Muerta, en Río Negro, hasta la provincia de Buenos Aires, en Saliqueló, y que tiene concretada la licitación para la construcción del segundo tramo, que amplía la red hasta la localidad de San Jerónimo, en Santa Fe.
Puntualmente, Ferraro consideró que "no resulta lógico" que el Estado financie, a través del presupuesto nacional "un gasoducto que nadie de los que pagamos impuestos usamos".
En diálogo con el canal LN+, ratificó la postura de terminar con la obra pública y para que se convierta en inversión del sector privado. “Donde hay una demanda hay una oportunidad de negocios”, aseguró Ferraro y agregó que en “muchos de los proyectos de infraestructura existe una demanda, si no, no tiene sentido llevarlo adelante”.
“Este es un enfoque estratégico nuestro que implica también que el sector privado se acomode culturalmente a este enfoque que lo vamos a acompañar”, explicó e indicó que el sector privado, "ante una concesión precaria o una prórroga, lógicamente no ha hecho la inversión que debería hacer y además tienen reclamos".
"Toda esa infraestructura que se tiene que poner en valor, más la nueva, como estábamos hablando de los caminos rurales, o como estábamos hablando que en Vaca Muerta se necesita una acueducto para no llevar el agua en camiones", añadió.
En este sentido, definió que “cuando hago un gasoducto por ejemplo con el presupuesto nacional ni ustedes, ni yo, ni nadie que pagamos impuestos usamos ese gasoducto”. "Si no lo usamos y lo estamos pagando con nuestros impuestos, no resulta lógico”, añadió.
“Por supuesto es más fácil para un funcionario pelear una partida que ejecutar una obra pública desde el presupuesto nacional. Es mucho más sencillo, pero donde hay una demanda, indudablemente hay un usuario interesado y una oportunidad de inversión”, completó.
