Voz parlamentaria autorizada por su vasta experiencia, Graciela Camaño está haciendo un impasse en su carrera política y la actualidad la encuentra más abocada al mundo académico y profundizando sobre los temas medioambientales. Sin embargo, no deja de estar atenta a lo que sucede en nuestro país y en una entrevista exclusiva con “En contexto” de Data Diario repasa su visión sobre Sergio Massa, la incipiente presidencia de Javier Milei y su dogma “libertario” y su idea de cómo deberían abordarse los problemas nacionales.
Massa, un presidente que no fue pero que le “gustaría que lo fuera”
Más allá del aprecio personal que siente por el exministro y candidato Sergio Massa, Camaño imagina al tigrense intentando de nuevo ofrecerse como candidato: “Sí ¿por qué no? Es joven. A mí me gustaría que fuera Presidente en algún momento de este país”, confesó ante la pregunta de la periodista Mariana Dahbar.
En ese sentido, la dirigente cree que actualmente Massa está haciendo “un respetuoso silencio a una situación”, en alusión a la derrota electoral. “La ciudadanía a él le dio un mensaje, y si él se está manteniendo en silencio es porque ha interpretado el mensaje que le dieron los ciudadanos, a él no lo eligieron, y él se está manteniendo en silencio”, abundó.
Además, “a diferencia de lo que creen algunos kirchneristas que le critican el hecho de no salir”, Camaño consideró que es una actitud “muy inteligente de su parte” permanecer en ese estado, por ahora. “Es una manera de demostrar el respeto por la voluntad del pueblo”, argumentó al respecto.
Y culpó al mal gobierno del Frente de Todos por la derrota de Massa. “La gente se expresó con bronca y lo puso a él en el lugar del gobierno que estaba, de alguna manera, no ofreciendo las soluciones”.
Por otra parte, comentó que en la campaña sintió la necesidad de pronunciarse públicamente a favor del exministro porque para ella era “una locura que una persona que no tenía ningún tipo de estructura política y que decía lo que decía Milei, gane un proceso electoral”.
No vislumbra un futuro promisorio con las ideas de Milei
Si bien entiende que un porcentaje de la población está en “un compás de espera y con cierta ilusión” todavía acerca del Gobierno de Milei, Camaño dejó en claro que no comparte la mayoría de las premisas del libertario y que sus ideas no son las adecuadas para sacar el país adelante.
Y para muestra apuntó al proyecto de Ley Ómnibus. La dirigente subrayó que con ese proyecto Milei apunta a retrotraer el país a la “Constitución de 1853, donde había un aspiracional de libertad, pero ninguno de los derechos sociales que fueron incorporados después. Es decir, todos los que tienen que ver con los trabajadores, usuarios, consumidores y ambientales; toda esa visión que hacen las constituciones en el mundo occidental, la Argentina las obvia”, amplió.
En esa línea, Camaño planteó que la idea de Milei de “inexistencia del Estado es inviable”. Y alertó: “Esta idea libertaria no es ni siquiera liberalismo, entonces él construye un relato con el cual si las cosas no salen bien él no va a tener la culpa, la culpa la va a tener la casta”.
En otro pasaje, comentó que se mostró muy sorprendida por el discurso del libertario en Davos, pleno epicentro de la Agenda 2023. “Él va a hacer toda su letanía de cómo el mundo va a prosperar con la agenda del siglo XVII, qué sé yo, me pareció muy alucinante”.
También dijo que la posibilidad de que alguien como Milei haya llegado a la presidencia tiene que ver con el hastío de una sociedad que viene de dos “muy malos gobiernos”.
“La solución es política, no económica”
Por último, insistió acerca de que le resultan inapropiados los planes de Milei para sacar al país de la crisis. “No se ve que se resuelvan los problemas y sí se ve un futuro de mayor ajuste”, alertó.
¿Qué le faltó durante todo este tiempo a la Argentina? Camaño concluyó: “Yo creo que no le faltó una política económica, le faltó política. Le faltó que la dirigencia política esté a la altura de las circunstancias. Entonces no es más economía, es más política. Y de repente vos tenés un profesor de economía, de una materia muy específica, que además se pregona libertario, ni siquiera es liberal, pero que además es anárquico…”.
