El líder de la Iglesia Católica, el Papa Francisco, abrió las puertas de su residencia en Santa Marta para recibir a destacadas figuras argentinas en materia de Derechos Humanos. Estela de Carlotto, presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, junto a su hija Claudia Carlotto, directora de la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (CONADI), fueron algunos de los invitados de honor en este encuentro histórico.
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El clima fue de calidez y cercanía, evidenciando una atmósfera familiar donde el Papa y los representantes argentinos compartieron sus reflexiones sobre política, sociedad y la importancia de fortalecer los lazos de solidaridad entre los seres humanos.
Antes del encuentro, Estela de Carlotto describió al Papa Francisco como "un hermano menor", resaltando así la estrecha relación que une a ambos líderes en la defensa de los valores humanitarios y la justicia social.
Además de los referentes de Derechos Humanos, también estuvieron presentes Horacio Pietragalla, nieto rescatado, y miembros de la Universidad de Roma Tre, institución que recientemente otorgó al Papa el título de Doctor Honoris Causa.
La reconocida activista Estela de Carlotto viajó a Italia para ser galardonada con un doctorado en Lengua y Literatura por la Universidad Roma Tre, en reconocimiento al trabajo de las Abuelas de Plaza de Mayo en la búsqueda de sus nietos desaparecidos durante la dictadura militar argentina.
Durante la ceremonia, Carlotto aprovechó la ocasión para alertar sobre el actual panorama político en Argentina, señalando que "algunas de las políticas de Memoria, Verdad y Justicia están en peligro". Hizo hincapié en los discursos de odio y negacionismo que provienen de ciertos sectores del gobierno, en un intento por deslegitimar la lucha de los argentinos por la memoria y la democracia.
En particular, Carlotto mencionó al Gobierno de Javier Milei y Victoria Villarruel, acusándolos de intentar socavar los logros alcanzados en materia de derechos humanos. Sin embargo, destacó la importancia de la lucha colectiva y afirmó que Abuelas de Plaza de Mayo seguirá buscando a las aproximadamente 300 personas que viven con su identidad vulnerada.
Asimismo, recordó los avances conseguidos gracias al esfuerzo del movimiento de Derechos Humanos, como que "se anularon las leyes de obediencia debida y punto final, comenzaron los juicios a los genocidas y sus cómplices, y cada lugar de encierro, de tortura y de muerte se convirtió en un espacio de memoria"
Estela de Carlotto recibió el doctorado Honoris Causa de la Universidad Roma Tre: "Seguimos buscando a unas 300 personas que viven con su identidad vulnerada"
La presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo recibió una distinción “por su compromiso cívico, humano y cultural” en materia de derechos humanos.
La presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, recibió en Italia la investidura como doctora honoris causa que le entregó la Università degli Studi di Roma Tre, “por su compromiso cívico, humano y cultural”.
El reconocimiento ratifica tanto a Carlotto como a la asociación que encabeza como uno de los ejemplos de lucha por los derechos humanos más relevante a nivel internacional.
"Seguimos buscando a unas 300 personas que viven con su identidad vulnerada", dijo Estela al recibir la condecoración entregada por el rector de esa casa de estudios, Massimiliano Fiorucci, y la profesora Susanna Nanni, impulsora de la distinción.
Carlotto repasó la historia de Abuelas, el reconocimiento internacional y los logros de la organización. También destacó el trabajo del Banco Nacional de Datos Genéticos, “el único del mundo” que almacena información de familiares y sobrevivientes y puso en valor la creación de la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (Conadi).
En cuanto al plano actual, Estela advirtió que “algunas de las políticas de Memoria, Verdad y Justicia están en peligro” producto de “los discursos de odio y negacionismo, en muchos casos pronunciados por integrantes del gobierno de turno”.
En este sentido, denunció que la administración de Javier Milei y Victoria Villarruel “intentan deslegitimar nuestra lucha y la de todos los argentinos, por la memoria y la democracia”.
Como respuesta y modo de defensa de esto que sucede en el país, la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo puntualizó que “el único camino es la lucha colectiva con amor y perseverancia”, y ratificó que la organización seguirá buscando a los más de 300 nietos a los que falta restituir su identidad.
Para ello, Estela se refirió al “relevo institucional” que, por cuestiones naturales y de edad, las fundadoras de Abuelas dejarán en mano de nietos y nietas encontradas.
“Hoy son los propios nietos y nietas restituidos, sus hermanos, sus familias, los que le dan impulso a nuestro trabajo. Son ellos los que han tomado la posta y realizan las tareas que antes hacíamos nosotras”, resaltó.
Tal como en otras oportunidades consideró que las integrantes de ese organismo no son "heroínas ni diferentes, sólo mujeres, madres, abuelas”. Y aseguró que seguirán “luchando para defender la democracia y trabajando para encontrar hasta el último de nuestros nietos”.
