Luego de los anuncios del presidente electo, Javier Milei, de recortar la obra pública, el intendente de Laprida, Pablo Torres, analizó las implicancias que tendría la quita de esa ayuda en su distrito distrito.
El funcionario expresó que si el libertario decide hacer ese recorte, Laprida no podrá terminar de completar sus obras ya que ningún privado se va a interesar en finalizar algo allí.
“Ayer inauguré el tomógrafo y hoy lo empezamos a usar. Nos costó $200 mil dólares. ¿Te imaginas qué privado va a invertir eso en una ciudad de 11 mil habitantes para hacer 50 tomografías por mes?", expresó Torres en una entrevista con Argenzuela, por el canal C5N.
El funcionario resaltó que hoy en su distrito necesitan "el último tramo de desagües pluviales". "Son mil metros que cuando terminamos el proyecto estaban en $3 mil millones. Hoy nuestro presupuesto total es de $3.2 millones, y el 60% se va a sueldos. Con el 40% restante nosotros sobrevivimos”, manifestó.
"Si mañana se corta la obra pública, no se pueden hacer más viviendas, cloacas y asfaltos en Laprida; y es mucha gente que se va a quedar sin nada", advirtió.
Además, explicó que esa población "va a quedar con un Estado Municipal más pequeño", que será incapaz de realizar obras con financiamiento municipal o se quedará sin asistencia, "sea de salud, alimentaria o la que sea".
“Las obras tienen que venir de Nación y de Provincia, y sino no vamos a tener nada. Ni cloacas, ni luces led”, sostuvo. En esa línea, contó que tiene previsto junto al reelecto gobernador bonaerense, Axel Kicillof, construir 100 viviendas, pero que eso va a depender de la relación entre provincia y Nación.
