El Gobierno consideró este miércoles la posibilidad de modificar las metas con el Fondo Monetario Internacional (FMI) posteriores al segundo trimestre debido a las dificultades macroeconómicas por la guerra en Ucrania.
Así lo afirmó la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, en la conferencia de prensa que encabezó tras la reunión de Gabinete esta mañana. Explicó que cuando se cerraron las negociaciones aún no había guerra y las condiciones eran otras.
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“Cuando se alcanzó el acuerdo no había guerra, con el impacto que tiene el precio de la energía y de su importación”, expresó en presencia de los ministros Matías Lammens, Gabriel Katopodis y Carla Vizzotti.
Anteriormente, el Gobierno y el Fondo ya discutieron la posibilidad de modificar las metas trimestrales pero con la condición de mantener las anuales. Tras las conversaciones, se logró cambiar algunos puntos para el segundo trimestre.
En ese entonces se acordó un margen extra de déficit por $308.000 millones con un tope de $874.000 millones. También se redujo la meta de acumulación de reservas por parte del Banco Central en 700 millones de dólares.
Cerruti recordó que las metas del primer trimestre se cumplieron y aseguró que las del segundo “se van a cumplir” (con las modificaciones acordadas) y que están evaluando los puntos del tercer trimestre y la posibilidad de cambiarlos.
Por su parte, la ministra Silvina Batakis fue bien recibida por el FMI y consideraron que las medidas anunciadas son “consistentes” con el plan acordado hace pocos meses. De igual forma, anticipó que en cada revisión trimestral “habrá modificaciones”.
El presidente Alberto Fernández viajará a Washington la próxima semana para reunirse con su par Joe Biden y se espera que en dicho encuentro dialoguen sobre una nueva revisión del acuerdo con el Fondo.
La conferencia de prensa completa
La dura advertencia del FMI sobre el 2023 que preocupa al Mundo
La directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, planteó este martes el riesgo de una recesión por el impacto de la suba de tasas para contrarrestar la inflación, lo que terminará por generar menor actividad.
La predicción de la economista tuvo lugar en una reunión preparatoria a la del G20, en la cual, vaticinó: "El próximo año será más duro por un mix crisis sobre una crisis" que genera la guerra entre Rusia y Ucrania tras la pandemia. En esa exposición hizo una dura advertencia sobre las deudas soberanas en dólares.
"La deuda en dólares no es buen lugar donde estar si no se producen dólares", alertó Georgieva y apuntó que los servicios de deuda son cada vez más caros por la suba de tasas de interés para paliar la inflación.
"Qué pasa cuando los países tienen que pagar deuda en dólares y no producen dólares. Hay una crisis de deuda en proceso", remarcó la titular del FMI.
La economista dejó al desnudo el pésimo negocio que es, como lo fue en la Argentina, tomar deuda en dólares para el pago de gastos corrientes en moneda doméstica. Una inconsistencia que aplicó el macrismo y todavía algunos de sus ex funcionarios sigue defendiendo. "La deuda en dólares no es buen lugar donde estar si no se producen dólares", aseveró.
