El presidente Alberto Fernández decretó feriado nacional para mañana a raíz de los festejos populares por el triunfo del seleccionado argentino de fútbol, que se consagró ayer campeón mundial en Qatar y realizará un recorrido desde Ezeiza hasta el Obelisco con los jugadores, cuerpo técnico y la flamante Copa obtenida.
El mandatario tomó esa decisión esta tarde a través de un Decreto de Necesidad y exceptúa de la norma a la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y los bancos, informaron esta tarde fuentes oficiales.
Producto de la caravana que se hará desde el predio de Ezeiza hasta el Obelisco en ida y vuelta, el presidente Alberto Fernández firmará un Decreto de Necesidad y Urgencia en el que confirme que será durante toda la jornada. Pero la excepción serán bancos y AFIP que trabajarán hasta las 12.
El recorrido
El recorrido que está estipulado es: Ezeiza - Av. Ricchieri - Dellepiane - Av 25 de Mayo - Av. 9 de Julio - Libertador - Figueroa Alcorta - Libertador- General Paz - Ricchieri - Ezeiza. El recorrido, que tendrá como epicentro el Obelisco, finalizará durante tarde.
El operativo de seguridad estará coordinado por la Policía Federal y la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, que trabajarán en conjunto para proteger al colectivo que trasladará a los jugadores.
El domingo, el Gobierno había analizado declarar un asueto administrativo para empleados públicos el día en que la Selección se encontrara con la gente. Primero se pensó en el lunes, pero cuando Aerolíneas Argentinas confirmó que el plantel recién llegaría en la medianoche, se descartó la posibilidad. Luego se evaluó un asueto para el martes, pero al final se decidió decretar el feriado.
Se trata de una medida inédita, ya que no se había declarado asueto ni feriado en las consagraciones mundiales anteriores de la Selección, en 1978 y 1986.
En tanto, el operativo de seguridad no solo se centrará en el colectivo del plantel, ya que también deberá evitar incidentes como rotura de vidrieras de comercios, peleas o accidentes.
Durante el velatorio de Diego Maradona en Casa Rosada se produjeron desmanes y el recuerdo de esta situación aún está fresco. Los días posteriores las gestiones nacional y porteña cruzaron pases de factura y se responsabilizaron mutuamente por lo sucedido.