En una sesión maratónica de casi 21 horas, la Cámara de Diputados aprobó en la mañana de este domingo el proyecto de ley de reforma del impuesto a las Ganancias, el cual eximirá de pagar ese tributo a más de un millón de trabajadores y permitirá mejorar el poder de compra de asalariados y jubilados.
La iniciativa fue aprobada por 241 votos a favor, aportados por el Frente de Todos, Juntos por el Cambio y los interbloques Federal, Unidad para el Desarrollo, Acción Federal, Frente de Izquierda y el Movimiento Popular Neuquino.
Tres legisladores de JxC se abstuvieron: Luciano Laspina (PRO), Facundo Súarez Lastra (UCR) y Mónica Frade (Coalición Cívica).
Antes de empezar a sesionar, el plenario legislativo sancionó los proyectos de reforma al monotributo, la inclusión de la educación ambiental en todos los colegios públicos y privados, y una actualización de la ley del dopaje en el deporte.
Durante el largo debate, expusieron más de 70 legisladores. La media sanción obtenida en la cámara baja es de vital importancia para aliviar los bolsillos, ya que, de ser aprobado por el Senado, se eximirá a los trabajadores que cobran hasta $ 150.000 brutos y los jubilados hasta ocho haberes de pagar el impuesto.
Según los números que brindó el oficialismo, esta reforma beneficiará a alrededor de 1.267.000 personas, entre ellos asalariados y jubilados, con lo cual quedarían exentos de ser alcanzados por el tributo el 93% de los trabajadores.
Carlos Heller, titular de la comisión de Presupuesto precisó que se excluirá del pago de impuestos a las Ganancias a los bonos productivos en los salarios y a los suplementos que reciben las Fuerzas Armadas.
También quedará fuera de Ganancias las horas extras que realizan los recolectores, tal como lo había solicitado el diputado Facundo Moyano.