El Instituto de Salud Pública de Chile (ISP) aprobó este miércoles el uso de emergencia de la vacuna rusa Sputnik-V contra el coronavirus, ante la falta de entrega del laboratorio norteamericano Pfizer y ralentizó la campaña de inmunización contra el Covid-19.
Es la sexta en ser habilitada y se suma a Sinovac, Astrazeneca/Oxford, CanSino, Johnson&Johnson y Pfizer/BioNTech, para reforzar los laboratorios que asisten al país vecino en la lucha contra la pandemia. Anteriormente, algunos municipios tuvieron que suspender la vacunación ante la falta del antídoto.
Fuente de la cartera sanitaria informaron "la situación señalada por algunos municipios del país sobre la falta de vacunas Pfizer" y explicaron que la vacunación se mantiene "sobre la base de un stock limitado de remesas de vacunas que ingresan al país".
En total, Chile ya recibió un aproximado de 27 millones de dosis de los distintas farmacéuticas. La más utilizada es sin dudas la Sinovac (51% de efectividad) y se está evaluando la posibilidad de aplicar una tercera dosis "de refuerzo" ante la aparición de la variante Delta.
A su vez, las autoridades indicaron que las fechas de vacunación "deben ser respetadas por todos los actores" porque la ausencia puede repercutir en la disponibilidad de vacunas.