Durante esta mañana declararon ante la Justicia los policías de la Comisaría 1° de La Plata a la que asistieron la diputada provincial Carolina Píparo y su marido Juan Ignacio Buzali luego de atropellar a dos motociclistas inocentes.
Según informó el diario Pagina 12, los uniformados aseguraron en su declaración bajo juramento que la legisladora y su esposo pidieron ir al baño en reiteradas ocasiones, que allí vomitaron, tuvieron que limpiar los sanitarios y ambos tenían fuerte olor a alcohol.
Con estos testimonios, la situación de la diputada macrista y su pareja se complica, al igual que compromete al secretario de Seguridad platense, Darío Ganduglia, quien no realizó el correspondiente test de alcoholemia a la pareja en la madrugada del 1 de enero.
La fiscal María Eugenia Di Lorenzo no solo investiga el supuesto robo que habría sufrido Píparo y el posterior choque a los motociclistas, sino también una maniobra de encubrimiento de parte del municipio por no realizar el test para corroborar si estaban alcoholizados y la edición de los videos de las cámaras de seguridad que hay en las calles por donde pasó la camioneta que manejaba Buzali.
También hay que sumar que la legisladora aseveró que después del robo fue a buscar ayuda de los efectivos policiales, pero luego se recuperaron imágenes en las cuales se ve al vehículo circulando en contramano a gran velocidad y pasando frente a la Comisaría n°4 de La Plata y sin embargo no se detuvieron.
La declaración de los efectivos de las fuerzas de seguridad complica a los dos implicados y se suma a la sumatoria de hechos confusos tales como un auto que aparece y desaparece de la nada en el video de las cámaras de seguridad, el cual fue editado para que parezca que Píparo y Buzali no perseguían a los motociclistas.