En el Día Internacional de la Mujer y luego de la polémica decisión de cambiarle el nombre al Salón de las Mujeres de la Casa Rosada horas antes de la movilización feminista por el 8M, el Gobierno renombró ese espacio como el Salón de los Próceres argentinos y colgó el cuadro del ex presidente Carlos Menem.
El Gobierno de Javier Milei decidió anunciar esa medida justo este día de lucha de las mujeres. De esta forma, el accionar significó un acto de provocación hacia las organizaciones de mujeres que se manifiestan como cada año.
El cuadro del ex presidente riojano está acompañado de un pequeño texto donde se destacan sus logros para que sea considerado "prócer". Según el Gobierno, Menem se ganó un lugar en el Salón porque "sus reformas propiciaron el desarrollo de uno de los mayores períodos de prosperidad económica soberana jamás vistos en Argentina".
“Dos veces presidente de la Nación, fue un abogado, político argentino y dos veces gobernador de la provincia de La Rioja. El Dr. Menem mostró con gran determinación política y fervor patriótico que Argentina podía estar a la altura de las grandes potencias del mundo, luego de décadas de decadencia económica y política, impulsando la modernización de sus instituciones y la integración en el mundo”, reza la leyenda que acompaña un cuadro con su imagen en la época de su reelección, en 1995.
Y continúa: “Sus reformas propiciaron el desarrollo de uno de los mayores períodos de prosperidad económica soberana jamás vistos en Argentina durante el Siglo XX, y facilitó una nueva unidad nacional luego de décadas de altísimos niveles de tensión política y social”.
De todas formas, esto no es nada nuevo. En reiteradas oportunidades, el presidente Javier Milei expresó abiertamente su admiración por Menem, describiéndolo como un líder que devolvió al país a la senda del progreso en la década de 1990. Es más, durante su campaña, elogió las políticas de desregulación y privatización implementadas por Menem, que según él, llevaron a una era de crecimiento económico y estabilidad.
Polémicas por el armado del Salón de los Próceres
Carlos Menem es el único dirigente de origen peronista en el Salón de los Próceres: no están ni Juan Domingo Perón ni Néstor ni Cristina Kirchner.
También integran ese espacio Juan Bautista Alberdi, Julio Argentino Roca, Domingo Faustino Sarmiento, Manuel Belgrano y José de San Martín.
La polémica no solo viene por algunas presencias, sino también por las ausencias de los presidentes que representaron al radicalismo. En ese salón no está Hipólito Yrigoyen y tampoco Raúl Alfonsín, quien condujo el país tras la recuperación de la democracia en diciembre de 1983.