El pasado domingo 13 de agosto se desarrollaron las elecciones primarias en todo el país. Sin embargo, los comicios en la Ciudad de Buenos Aires generaron repercusiones a lo largo de la jornada electoral. Y es que en CABA se implementó el sistema de boleta única electrónica que tuvo inconvenientes lo que generó largas filas de espera en los establecimientos educativos. Fueron las declaraciones de la candidata presidencial de “Juntos por el Cambio”, Patricia Bullrich, quien se pronunció en contra del voto electrónico por la demora y el mal funcionamiento del sistema.
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Por su parte, la jueza federal electoral en el distrito porteño, María Servini, también alzó su voz y reclamó a la Cámara Nacional Electoral "una profunda reflexión de cara a los comicios de octubre". En este sentido, le solicitó a la Cámara Nacional Electoral que el 22 de octubre se voten de manera separada o en fechas diferentes las candidaturas locales de las nacionales.
El pedido de la Jueza Servini ante la CNE
Servini realizó una presentación escrita donde describió con lujo de detalle los inconvenientes que hubo en la jornada electoral en la Ciudad de Buenos Aires que “afectaron gravemente el desarrollo del mismo”. "Estos inconvenientes transformaron esta elección, en los comicios más problemáticos y conflictivos de los últimos 30 años en esta ciudad, afectando el derecho a sufragar de muchos ciudadanos que no pudieron votar a nivel local, o debieron hacerlo en condiciones deficientes", aseguró.
"Todo ello innecesariamente y en virtud de situaciones que las autoridades locales de la ciudad de Buenos Aires no previeron, planificaron mal y ejecutaron peor", subraya la jueza y junto a la presentación sumó una documentación fotográfica con registros de los problemas técnicos en los dispositivos electrónicos.
Cabe señalar, como en su momento denunció Patricia Bullrich que “aparecían otras listas”; en el documento presentado por Servini, se detalló sobre la aparición de candidatos distintos a los elegidos, incluso de otros países.
Seguidamente, Servini agregó en la presentación un punteo de todos los inconvenientes anteriormente mencionados “todos relacionados con la implementación de la Boleta Única Electrónica y las máquinas utilizadas a tal fin, adquirieron una dimensión tal que provocaron que muchos ciudadanos tuvieran que hacer largas filas con una espera de hasta más de dos horas para votar, algo que no había sucedido nunca, ni aún durante la crisis sanitaria provocada por la pandemia de Covid-19".
Y continuó: "Además, sumó complicaciones para las autoridades de mesa por el hecho de tener dos urnas en cada mesa de votación, lo que provocó demoras al momento del escrutinio y confusión en torno a la documentación relacionada con cada urna”.
"Hubo autoridades de mesa que ante el nerviosismo generado por la situación más la aglomeración de electores que querían sufragar, colapsaron emocionalmente y manifestaron su intención de no cumplir su función en octubre próximo", concluyó la magistrada.
Este jueves trascendió que la jueza Servini dio por caído el convenio electoral con la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Esto significaría que la Ciudad no podrá organizar las elecciones a jefe de gobierno con el dispositivo electrónico en las mismas aulas donde se desarrolla la elección nacional. Tendrán que realizarse otro día ó en otros establecimientos educativos. La otra opción, sería que tanto las elecciones nacionales como las elecciones a jefe de gobierno sea con boleta papel.