El exministro de Educación durante la gestión de Mauricio Macri, Alejandro Finocchiaro, hizo polémicas declaraciones contra la presidenta de las Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, y contra la presidenta de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini. El exfuncionario intentó sacar rédito de cara a las elecciones con el crimen del kioskero en Ramos Mejía.
En diálogo con Radio Mitre, el candidato a diputado nacional de Juntos por el Cambio en la provincia de Buenos Aires declaró: "En Argentina hay una grieta de características ideológicas y morales. De un lado están los delincuentes y gente como Zaffaroni, Hebe de Bonafini o Estela de Carlotto, que los defienden. Del otro lado estamos las personas de bien que queremos vivir en paz. El Estado tiene que garantizarnos que podamos vivir en paz".
Luego dijo que el delincuente tiene que cumplir la condena, sin aclarar que el presunto asesino del kioskero había cumplido seis años de prisión efectiva -su condena completa- por robo a mano armada. "La sociedad está mejor cuando un delincuente es condenado y cumple su condena, que es para castigar y excluir un elemento nocivo para la sociedad. La sociedad está mejor cuando la policía abate a un delincuente", lanzó.
Por último, sentenció: "En ningún país del mundo sucede esto. El contrato que hicimos para vivir juntos, que es la Constitución, prevé que nos aseguren la vida, la propiedad y la libertad". Y concluyó: "En Argentina en los últimos 20 años hemos naturalizado lo que no es natural. hemos naturalizado que hay un sector de la sociedad que no trabaja y otro que sí lo hace para mantenerlos. Hemos naturalizado que tenemos suerte si somos víctimas de un delito pero no nos pegan un tiro. Hay que terminar con eso".
