Las árduas jornadas laborales que en algunos casos superan las 45 horas semanales, el alto porcentaje de empleados contratados bajo la informalidad y uno de los salarios mínimos vitales y móviles más bajos de la región son algunas de las problemáticas que más preocupan al gobierno de Alberto Fernández en materia laboral.
Y según el portal Gestión Sindical, desde el Ministerio de Trabajo admitieron que se encuentra "en revisión" la idea de reducir las jornadas laborales y que la medida se encontraría "en discusión" por parte de los funcionarios que integran el gabinete de dicho Ministerio que encabeza Claudio Moroni.
La buena noticia que significó el aumento del tope del impuesto a las Ganancias a trabajadores que perciben salarios de 150 mil pesos resolvió una histórica demanda por parte del sector sindical, pero entienden que ahora se debe cristalizar con otras medidas de fondo que permita una mejor calidad de vida para la mayoría de los trabajadores.
La noticia que dio a conocer el medio Gestión Sindical, argumenta que el Ministerio analiza establecer una semana laboral de cuatro días, en un proyecto muy parecido al que se aprobó en España este último mes. Sin embargo, también resaltan el proyecto que presentó el dirigente sindical y diputado nacional por el Frente de Todos, Hugo Yasky, quien apunta directamente a la reducción de horas de trabajo, sin hacer hincapié en la cantidad de días laborales.
Por la pandemia del coronavirus se produjo una aniquilación de puestos laborales a nivel mundial y que la Organización Internacional de Trabajo (OIT) estimó que para el 2020 la pérdida habría alcanzado a nada menos que 245 millones.
El secretario general de la CTA de los Trabajadores busca reducir las jornadas laborales de 48 a 40 para “formalizar miles de empleos, algo que en este contexto resulta imprescindible”. La iniciativa cuenta con el aval de la central obrera, y es parte de una larga discusión que el sector lleva adelante desde su creación.
El proyecto apunta a “darle un marco legal a una realidad de hecho y regularizar la situación laboral de cientos de miles de trabajadores y trabajadoras en este contexto de alta desocupación, que la pandemia no hizo más que profundizar”.
“Debemos crear un marco legal ajustado a la realidad, que garantice a quienes trabajan la salud y las condiciones laborales dignas que indica la Constitución y que la pandemia demostró que son imprescindibles”, argumenta Yasky en su proyecto.
Asimismo, otro de los temas que está en revisión está vinculada a la igualdad de género que, en un sistema laboral patriarcal, las mujeres corren con una importante desventaja en cuanto a sus salarios y el acceso a puestos de jerarquía a nivel laboral.
Finalmente, para las próximas semanas podría haber una novedad respecto a estas problemáticas y se daría a conocer de manera oficial por parte del Ministerio de Trabajo.
