La irrupción del negocio del escaneo de datos personales, al parecer, llegó para quedarse. Y cada vez son más son las empresas que utilizan este recurso, aun con fines poco específicos. Lo cierto es que en la provincia de Buenos Aires, tras un trabajo efectivo del ministerio de Producción, se descubrió que en el caso de una de ellas, Worldcoin, ejercía presuntas cláusulas abusivas, por lo que se la intimó y todavía no respondieron.
Las autoridades bonaerenses también advirtieron contradicciones entre lo informado por la propia empresa y la información obtenida a partir de fiscalizaciones realizadas en distintas localidades de la Provincia. De esta manera, la empresa podría llegar a pagar hasta $1000 millones en multas.
“Cabe preguntarse si los datos biométricos se almacenan o si son eliminados en forma inmediata, si hay bases de datos donde quedan guardados y dónde se almacenan los datos personales de las y los usuarios de la Argentina”, observa Ariel Aguilar, subsecretario de Desarrollo Comercial y Promoción de Inversiones de la Provincia, organismo del que depende la Dirección Provincial de Defensa de los Derechos de las y los Consumidores. “La complejidad de estos contratos, lo novedoso de la operatoria desplegada, el bien jurídico que está en juego y la falta de información, impiden comprender clara y plenamente las reglas y el funcionamiento de toda esta operatoria”, añade Aguilar.
Actuaba en distintas ciudades bonaerenses
En estos contratos de adhesión, denominados “Términos y Condiciones de Uso”, “Aviso de Privacidad” y “Formulario de Consentimiento de datos”, Worldcoin incurriría en distintas infracciones.
La empresa, que se expone a multas de hasta 1000 millones de pesos, realizó sus actividades en las localidades bonaerenses de Morón, Mar del Plata, Avellaneda, La Matanza, José C. Paz, Florencio Varela, Quilmes, San Miguel, Pinamar, Tres de Febrero, Villa Gesell, La Costa, La Plata, Berisso, San Martín, Zárate, Malvinas Argentinas, Escobar, General Rodriguez, Vicente López, La Matanza, Ezeiza y Almirante Brown, donde convocaba a las y los consumidores a brindar datos biométricos personales y privados –el escaneo del iris del ojo y del rostro, con un dispositivo tecnológico denominado Orb–, a cambio de instalarse en el teléfono la aplicación de finanzas World App y recibir criptomonedas de la firma Worldcoin.