Tras la presentación de un proyecto en Diputados para suspender las PASO, el jefe de gabinete, Juan Manzur, admitió que "es un tema en discusión" dentro de la agenda política, aunque aún no tiene consenso dentro de la coalición oficialista.
Si bien los gobernadores peronistas impulsan esta enmienda a la ley electoral, y el ministro coordinador muchas veces oficia como vocero de este sector, el propio Alberto Fernández por ahora resiste esta iniciativa e insiste en que haya primarias en 2023 para definir las candidaturas a todos los cargos nacionales.
Tras la reunión de Gabinete celebrada esta mañana en Casa Rosada, Manzur se refirió a la presentación del último martes realizada por el diputado rionegrino Luis Di Giacomo, representante de un partido provincial pero que suele "jugar" con el oficialismo, para "suspender o derogar las PASO".
En este sentido, el dirigente tucumano sostuvo este miércoles que "es un tema en discusión. Vemos que en varias provincias y en el marco de las autonomías provinciales han tomado decisiones al respecto", al referirse a las leyes sancionadas en San Juan y San Luis que cambian las reglas de juego en materia electoral local.
Pero al referirse a cambios en la normativa a nivel nacional, Manzur dijo que "es un debate del Congreso, estamos siguiendo muy de cerca lo que pasa en Diputados. Aún no tenemos el proyecto, lo vamos a analizar y en función de eso veremos, pero es una decisión excluyente del Poder Legislativo. Conocemos de antemano la posición favorable de muchos diputados de diferentes provincias argentinas y lo vamos a seguir muy de cerca".
De este modo, el ministro coordinador blanqueó oficialmente el debate que hoy envuelve al oficialismo y que tiene a la defensiva a Juntos por el Cambio, que rechaza estos cambios. Semanas atrás habían sido los gobernadores peronistas, con el chaqueño Jorge Capitanich a la cabeza, los que pusieron el tema sobre la mesa con el argumento de utilizar "estos gastos electorales", que según el proyecto de Presupuesto 2023 superan los $20 mil millones, para que las provincias puedan tener tarifas de transporte y energía diferenciadas.
Justamente los gobernadores del Norte Grande, del que Capitanich forma parte, se encuentran en Estados Unidos junto al ministro Wado de Pedro (Interior) en busca de inversiones para sus distritos.
Desde Washington más de un mandatario dejó trascender su malestar por la bajada de línea que Alberto Fernández dio en la cena del último lunes con la mesa chica de la CGT, donde reiteró que las primarias "podrían ordenar mucho mejor" al Frente de Todos en los próximos comicios.
No, pero tal vez...
Para los integrantes de la Liga de Gobernadores que impulsan a enmienda, la bajada política del Presidente resultó por lo menos "inoportuna" y ante interlocutores que no hacen a la cuestión electoral. No se les escapó, con todo, que el primer mandatario buscó enviar un "mensaje político" hacia la intentona que promueven los mandatarios, pero también otros sectores del oficialismo.
De todos modos, el jefe de estado, según se pudo saber, más allá de exponer su postura sobre la controversia habría manifestado que llegado el caso "se amoldaría a la postura mayoritaria" de la coalición oficialista.
Mientras, las espadas del FDT en Diputados están trabajando sigilosamente para buscar apoyos a la modificación de la enmienda electoral. Contarían, por ahora, con el aval de un grupo de legisladores del interbloque Federal y de los libertarios de Javier Milei. Si llegarán a "tener los números" para aprobar la ley, seguramente se intensificará el debate hacia dentro del oficialismo para definir si se avance en las comisiones con el texto de Di Giacomo o bien con una iniciativa propia.