Lo que debía ser una fiesta del fútbol y un gran espectáculo, luego de la Copa América 2021, terminó en un horrible escándalo por parte de las autoridades brasileñas. La Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria quiso detener y deportar a los tres futbolistas argentinos que juegan en la Premier League, Emiliano Martínez, Cuti Romero y Giovani Lo Celso. Sin embargo, lo intentaron hacer con el partido iniciado y todo terminó en un descalabro.
Un hombre, que en principio parecía de sanidad, fue el primero en entrar al campo de juego y terminó increpando a los jugadores argentinos. Este sujeto se detuvo en la cancha, en ese momento Nicolás Otamendi y Marcos Acuña se acercaron para pedirle que se fuera y de mala manera, el hombre respondió con manotazos. La situación casi se va de las manos y el cuerpo técnico argentino tuvo que evitar algún mal mayor.
Según informó Mariano Antico, corresponsal de TyC Sports, la persona pertenecía a la policía federal de San Pablo y en el momento del cruce con los argentinos era portador de un arma de fuego. Además, era ajeno a la ANVISA, pero ingresó con un papel en el que la Albiceleste debía firmar la deportación de los futbolistas de Inglaterra.
No conforme con esto, el hombre también esperó al plantel en la puerta del vestuario, con la misma intención de que se firmen los papeles.