Ayer River le ganó a Arsenal pero no se fue para nada contento. Pese a jugar bien, terminó apretado en el marcado (2 a 1) y encima recibió puras malas noticias. Antes de los 20 del primer tiempo, Fabrizio Angileri salió lesionado por una molestia muscular (hoy se determinará si es distensión o desgarro) y lo reemplazó Milton Casco, quien también se iría con una dolencia similar sobre el final del partido dejando a River con diez porque ya no tenía cambios.
Justamente, Marcelo Gallardo había agotado las variantes ante la lesión de Rafael Santos Borré, aunque este último caso es el que más optimismo trae porque sería solo un golpe, según los diágnosticos preliminares. Pero, las malas noticias siguen porque tampoco podría contar con Paulo Díaz para los partidos vs Boca y sobre todo para la semifinal de Copa Libertadores ante Palmeiras.
En declaraciones post partido, Marcelo Gallardo dejó en claro que si bien el clásico es un partido importante, la Copa Libertadores es la prioridad por lo que ante Boca el 02/01 jugaría con un equipo alternativo para cuidar jugadores de cara a la semifinal de ida ante Palmeiras el 05/01.
El tema es cómo rearmar la defensa. River se quedó sin laterales izquierdos ante la lesión de Angileri y Casco. Una alternativa era usar a Paulo Díaz allí que juega en todos los puestos de la defensa, pero arrastra una sinovitis de cadera por lo que también es probable que quede afuera. De esta forma, Javier Pinola que también era alternativa para jugar de "3" debería ocupar el lugar el chileno. Panorama complicado para Gallardo que deberá apelar más que nunca a su apodo de "Napoleón" para hacer una estrategia.