La presidenta de facto de Bolivia, Jeanine Áñez, tomó una drástica decisión y bajó su candidatura presidencial. Así lo anunció en sus redes sociales a tan sólo 31 días de las elecciones presidenciales en el país vecino.
La decisión, según argumenta en su mensaje, está basada en un posible triunfo del MAS, ya que su candidatura dividiría el voto.
"Hoy dejo de lado mi candidatura a la presidencia de Bolivia para cuidar la democracia. No es un sacrificio, es un honor porque lo hago ante el riesgo de que se divida el voto democrático entre varios candidatos y que, a consecuencia de esa división, el MAS acabe ganando la elección", dijo Áñez en el video difundido en las últimas horas.