El gobierno de Emmanuel Macron anunció un acuerdo con productores y distribuidores para congelar el precio de 5.000 productos, mientras negocia rebajas con supermercados y fabricantes.
“Era necesario alcanzar un acuerdo global entre fabricantes y distribuidores para romper esta espiral de inflación alimentaria que penaliza a todos nuestros compatriotas”, dijo el ministro de Finanzas, Bruno Le Maire, en una entrevista emitida por la cadena France 2.
El ministro admitió que algunos precios estaban bajando, pero no lo suficiente, en un contexto de derrumbe de valores en el campo de las materias primas.
Le Maire apuntó contra las multinacionales como Nestlé, Unilever y PepsiCo al advertir que "no juegan bien el juego" y “podrían hacer más”.
El acuerdo firmado incluye a 75 grandes productores y distribuidores que se comprometieron no solo a mantener el precio de algunos productos básicos, sino también a duplicar el número de mercancías no alcanzadas en el congelamiento.
El ministro aseguró que se establecerán controles para vigilar el cumplimiento de lo pactado. “Tendremos la lista de estos productos y comprobaremos si bajan o no aumentan. Debemos, repito, romper esta espiral inflacionaria”, afirmó.
Por otra parte, Le Marie anticipó que se adelantarán a septiembre las negociaciones entre fabricantes y supermercados tendientes a reducir las tarifas para 2024.
La tasa de inflación en Francia registró un repunte de medio punto porcentual al situarse en el 4,8% desde el 4,3% de julio, según cifras de Eurostat.
La suba en el precio de los alimentos moderó ligeramente su escalada en agosto, con un alza interanual del 11,1% desde el 12,7% de julio, incluyendo una subida del 9,1% en alimentos frescos, frente al 10,6% de julio.
