La canciller de Alemania, Angela Merkel, este martes que la propagación de la variante británica de Coronavirus desembocaría en una multiplicación por díez, en los próximos tres meses, en la incidencia acumulada.
En esa línea, la funcionaria hizo hincapié en la necesidad de aplicar "medidas duras" durante los próximos dos meses para evitar que la variante del Coronavirus de Reino Unido haga estragos en el país bávaro.
"Si no logramos parar esa variante británica tendremos para Semana Santa una incidencia diez veces mayor. Necesitamos aún entre ocho y diez semanas de duras medidas", declaró Merkel.
Alemania se encuentra transitando su fase más estricta del segundo confinamiento, que rige hasta el 31 de enero con las restricciones correspondientes al caso.
La incidencia acumulada (la proporción de personas que enferman en un periodo de tiempo concreto) en los últimos siete días aumentó a 164,5 casos por cada 100.000 habitantes.
Las medidas incluyen el cierre de colegios y comercios no esenciales, al igual que las actividades culturales, de ocio y gastronómicas. Por otro lado, las reuniones sociales se limitaron a los convivientes más una persona que no resida en ese domicilio.
Además, los residentes de los distritos con un incidencia acumulada en siete días de más de 200 casos por cada 100.000 habitantes no pueden alejarse más de 15 kilómetros de su localidad.