Una familia tipo necesitó juntar ingresos por $873.169 en junio para alcanzar una Canasta Básica Total y no ser pobre en el territorio argentino, informó esta tarde el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).
En paralelo, la canasta básica alimentaria (CBA), con la cual se sitúa la línea de indigencia, subió apenas 1,6%, el número más acotado desde junio de 2020, cuando la demanda estaba fuertemente deprimida por la cuarentena decretada a raíz de la pandemia de Covid-19.
De esta forma, y de acuerdo con los datos oficiales publicados por el INDEC, una familia de cuatro integrantes necesitó $393.319 para no ser indigente.
Las dos canastas treparon por debajo del Índice de Precios al Consumidor (IPC), que registró un ascenso del 4,6% durante el sexto mes del año.
El aumento respecto a 2023
El aumento acumulado en lo que va del año llegó al 63,4% y la variación interanual con respecto a igual mes del año anterior 277,4%
De esta manera, el costo de la Canasta Básica Total se incrementó del 2,6 en junio con respecto a mayo pasado, mientras que aumentó un 275,7% interanual y acumula una suba del 76,1 por ciento en lo que va del año.
En tanto, el INDEC detalló que una familia con tres integrantes requirió de $695.144 para no ser pobre en junio y de $313.128 para no caer en la indigencia.
Además, el organismo oficial detalló que en mayo de 2024, un hogar con cinco miembros precisó de $918.381 para no encontrarse en el umbral de la pobreza y de $413.685 para no ser indigente. Además, una persona adulta necesitó $282.579 para no ser pobre y $127.228 para no caer en la indigencia.
La inflación de junio fue de 4,6% y acumula un alza de 79,8% en el primer semestre
El Nivel general del Índice de precios al consumidor registró en junio un alza mensual de 4,6% y acumuló en el primer semestre del año una variación de 79,8%, según informó este viernes el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC). En la comparación interanual, el incremento alcanzó el 271,5%.
Luego de la fuerte desaceleración de precios que midió el INDEC el mes pasado, el dato del sexto mes del año registró un repunte debido a las subas en las tarifas de electricidad y gas y en alquiler de la vivienda. El mismo repunte sucedió en la Ciudad de Buenos Aires.
La división de mayor aumento en el mes fue Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (14,3%), por las subas en las tarifas de electricidad y gas y en alquiler de la vivienda. Le siguieron Restaurantes y hoteles (6,3%) y Educación (5,7%) por subas en todos los niveles de enseñanza. Los alimentos y bebidas, por su parte, aumentaron por debajo del promedio en junio y registraron un incremento de 3%. Entre ellos, se destacaron las alzas de verduras, pan y lácteos.
Los datos que brindó el INDEC este viernes coinciden con los dichos del ministro de Economía, Luis Caputo, quien había anticipado que en junio la inflación iba a estar por debajo del 5%.
La inflación de junio, rubro por rubro
La división que mostró el aumento más grande el mes pasado Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, con un alza de 14,3% explicada por las subas en las tarifas y alquileres. La siguieron “Restaurantes y hoteles” (6,3%) y “Educación” (5,7%). También se ubicaron por encima del nivel promedio las variaciones de Recreación y cultura (5,6%), Comunicación (5,3%) y Salud (4,7%).
Por su parte, la división con mayor incidencia en la región GBA, Noreste, Noroeste y Cuyo fue Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, mientras que en las zonas Pampeana y Patagonia el peso más grande correspondió al rubro Alimentos y bebidas no alcohólicas.
Por debajo del nivel general se ubicaron los aumentos de Transporte (3,9%), Alimentos (3%), Bienes y servicios varios (2,8%) e Indumentaria y calzado (2,7%). Las dos divisiones que registraron las menores variaciones en junio fueron Bebidas alcohólicas y tabaco (2,1%) y Equipamiento y mantenimiento del hogar (2,3%).