El consumo de carne vacuna en Argentina continúa en descenso. En los primeros siete meses de 2024, se registró una reducción del 14,1 % en comparación con el mismo periodo de 2023, alcanzando el punto más bajo en las últimas dos décadas y media, según datos de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados (CICCRA).
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De acuerdo con el informe, durante este periodo se consumieron 1.248 millones de toneladas de carne vacuna, lo que representa 205 millones de toneladas menos que el año pasado.
La drástica caída se da en medio de un contexto económico adverso, marcado por una recesión profunda y la disminución del poder adquisitivo de la población.
El consumo de carne vacuna cayó en comparación con el año pasado
En cuanto a la producción de carne, entre enero y julio se alcanzaron 1.779 millones de toneladas, un 8,8 % menos que en 2023, con una reducción de 170,66 millones de toneladas.
A pesar de este panorama, las exportaciones del sector tuvieron un repunte. Se estima que las ventas al exterior alcanzaron los 530,6 millones de dólares hasta la fecha, con un promedio mensual de 76 millones de dólares, lo que implica un aumento del 7 % respecto al mismo periodo del año anterior.
En julio, se faenaron 1,25 millones de cabezas de ganado, lo que muestra una leve mejora del 3,8 % respecto al mes anterior, impulsada en parte por el mayor número de días laborables.
Sin embargo, al comparar con julio de 2023, la faena sufrió una baja del 3,1 %, evidenciando que el sector sigue atravesando un momento complicado.
El consumo de carne vacuna cayó a 45 kilos por persona en 2024, el peor registro en 100 años
En medio de una economía debilitada y precios elevados, el consumo de carne vacuna en Argentina descendió a niveles históricamente bajos. Según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario, en 2024 el consumo per cápita anual caerá por debajo de los 45 kilos, una cifra sin precedentes en los últimos cien años.
El promedio histórico de consumo de carne en el país era de casi 73 kilos por persona, pero la cifra actual es incluso inferior al registro de 1920, cuando se consumían 46,9 kilos por habitante.
Esta caída muestra una tendencia sostenida desde la segunda mitad del siglo pasado, acentuada por la recesión económica que impulsa a los consumidores a elegir alternativas más económicas como el pollo y el cerdo.
Histórica caída en el consumo de carne vacuna en Argentina: los datos
A pesar de este registro, Argentina sigue siendo uno de los mayores consumidores de carne per cápita a nivel mundial, con niveles similares a Uruguay y superiores a países como Estados Unidos (38 kg), Australia (27 kg) y Chile (26 kg). Sin embargo, la proporción de carne bovina en la dieta argentina disminuyó fuertemente, mientras que el consumo de carnes aviar y porcina subió.
La Bolsa de Comercio de Rosario proyecta que el consumo total de carnes (bovina, aviar y porcina) en Argentina para 2024 será de aproximadamente 105,7 kg por habitante, una disminución del 9% en comparación con 2023 y el nivel más bajo desde 2011. En términos concretos, cada habitante consumirá siete kilos menos de carne que el promedio de los últimos diez años, que es de 112,8 kg.
Esta reducción en el consumo de carne bovina también está vinculada a la caída del poder adquisitivo. En 2024, el salario promedio alcanzará para comprar 146,6 kg de asado, un 5,6% menos que en 2023, cuando el poder de compra permitía adquirir 155,2 kg.
En la composición de la dieta cárnica del argentino promedio, la carne bovina representará el 42%, igual porcentaje que la carne aviar, mientras que la carne porcina constituirá el 16%. Esta evolución refleja un cambio en los hábitos alimentarios del país, con un aumento del 2,4% en el consumo de carne aviar y una caída del 3,5% en la carne bovina respecto al año anterior.
El análisis también destaca que, por primera vez en la historia, el consumo de carne vacuna será igual al de carne aviar, ambos alrededor de 44,5 kg por persona.