Fate, una de las mayores empresas de fabricación y exportación de neumáticos en el país, anunció que despedirá a 97 empleados y que tomará medidas para ajustar sus operaciones debido a la pérdida de competitividad en el mercado internacional tras la apertura de importaciones dispuesta por el Gobierno.
Según pudo saber este medio, la empresa propiedad del grupo Aluar está despidiendo trabajadores de su planta de San Fernando. La compañía tiene un total de 2.000 empleados y la capacidad productiva de ese complejo supera los cinco millones de neumáticos por año. Como en varios puntos del país, estos despidos se dan, en parte, por la baja de aranceles a la importación anunciada por la administración que conduce Javier Milei.
Fate expuso -en un comunicado- los motivos por los cuales decidió dejar sin trabajo a un centenar de empleados: "La actividad de la empresa se encuentra expuesta a factores muy negativos que incrementan severamente el costo de su producción: abusiva sobrecarga impositiva, restricciones cambiarias para el pago de insumos del exterior, deficiente infraestructura, sobrecostos derivados de la legislación del trabajo, baja productividad laboral, ausentismo, elevada conflictividad gremial, sólo por mencionar algunos”.
En el escrito, la compañía sostuvo que “el costo final de los productos que manufactura la empresa es muy superior al de neumáticos fabricados en otros países" y que esto se debe a los efecto de esas asimetrías. Por eso, continuaron explicando, "la consecuencia es una brecha de competitividad insalvable que torna imposible continuar exportando los productos que la empresa fabrica en la Argentina a mercados en los que nuestra marca está presente desde hace décadas”.
Además, señalaron que existen “escandalosas asimetrías” en el comercio exterior: otros países brindan subsidios e incentivos a la producción de neumáticos que se exportan a la Argentina. “A la inversa, un fabricante en la Argentina carece de esquemas comparables y, por encima de esto, debe afrontar sobrecostos y pagar derechos de exportación (único caso en el mundo). Finalmente, a diferencia de otros mercados maduros, nuestro mercado interno es débil en controles y mecanismos de defensa comercial normalmente aplicados en el mundo”, aseguraron.
“Por ello la Argentina resulta muy permeable al ingreso de neumáticos importados en condiciones que se enmarcan en el comercio desleal, vulnerando principios básicos que rigen el comercio internacional y la libre competencia”, advirtieron en el comunicado.
La apertura de importaciones agravó la situación
El despido de estos empleados se da también en el marco de la determinación que tomó el Gobierno para este sector: la disminución de aranceles para los neumáticos de camiones y buses, un insumo esencial para el servicio logístico, a cargo de la distribución y exportación de la mercadería, y para el transporte público tanto a corta como a larga distancia.
La reducción en el costo de importación de neumáticos de camiones y buses fue del 35 al 16%. “La medida representa un alivio para las empresas de fletes y de transporte de personas e incidirá en la baja de los precios finales que pagan los consumidores argentinos”, habían afirmado desde la Secretaría de Comercio.
Competitividad
Pese a estas dificultades, Fate ha realizado importantes inversiones destinadas a la modernización tecnológica de su planta y productos, en el afán de lograr mejoras de costos y competitividad que, por las causas referidas, no pudieron ser alcanzadas, agregan.
"En tales condiciones, no existiendo otros destinos para la producción exportable, y frente a la caída de demanda del mercado interno, resulta imprescindible adecuar el modelo operativo de la planta industrial al contexto descripto", manifestaron en el escrito.
Si bien confían en que "todos los involucrados puedan encarar este proceso con madurez y responsabilidad, en un marco constructivo", explicaron que continuarán "brindando los productos y servicios de calidad" que sus clientes y consumidores requieren, como lo hacen desde hace 80 años.