El Banco Central decidió subir al 81% las tasas que rinden los plazos fijos y otras referencias del mercado financiero, en medio de la tensión cambiaria y la elevada inflación. En medio de las tensiones generadas por la suba de dólar, el directorio de la autoridad monetaria tomó esa decisión.
El titular del Banco Central de la República Argentina (BCRA), Miguel Pesce, estuvo reunido por la mañana con el presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía, Sergio Massa, para analizar nuevas medidas.
El BCRA comunicó este jueves a las entidades financieras y operadores del mercado que la licitación de letras Leliq de este jueves, el instrumento que marca la tasa de referencia, se celebraría con una suba de 300 puntos básicos.
Según operadores bancarios, el BCRA comunicó que la tasa originalmente prevista en 78% anual pasaba a elevarse 300 puntos básicos al 81% nominal anual.
También los pases pasivos, otro instrumento que usa el BCRA para regular la masa monetaria, vieron subir sus rendimientos del 72% al 75% nominal anual.
La nueva suba llevaría al rendimiento de los plazos fijos al 6,65% mensual desde el 6,41% previo, todavía por debajo del último dato de inflación del 7,7% de marzo y expectativas que ubican en torno a 7% la inflación para abril.
El BCRA intentaría contener la reciente escalada de los dólares financieros al devolverle cierto atractivo al carry trade.
Con una tasa de plazo fijo en 113% de TEA desde el 16/03, la tasa real esperada a un mes vista era de -5,4% anual al preverse una inflación de 7% en marzo (125,2% anualizado).
Sin embargo, como sorprendió negativamente al ubicarse en 7,7% (143,6% anualizado), la tasa realizada se hundió a -12,6% anual, oscilando en los niveles más bajos desde la llegada de Massa.
Según el aporte de analistas, el riesgo de que la tasa persista en terreno muy negativo es un quiebre de los depósitos a plazo, motorizando un ritmo vertiginoso de los dólares financieros y, así, generando mayores presiones inflacionarias.
Con información de NA.