Este fin de semana, la Primera C esperaba ser una fiesta con la celebración de uno de los clásicos más importantes de la categoría, Leandro N. Alem contra Club Luján. Sin embargo, con menos de media hora de juego, el partido se debió suspender por un violento enfrentamiento entre las barras de ambos equipos. El cruce entre los violentos tuvo una violencia extrema y dejó más de una docena de heridos de bala. Todo se dio en pleno estadio, con el partido jugándose.
Inició el partido, pero tan solo duró 15 minutos. Todo inició cuando desde la propia cancha escuchaban armas disparándose desde las afueras, esto detuvo el encuentro. Sin embargo, la tensión aumentó y se trasladó dentro del campo de juego, lo que provocó que se termine suspendiendo. Según comentó olé, barras del Lechero llegaron por la calle Carlos Pellegrini y comenzaron a disparar contra un grupo de hinchas del Lujanero. Al percatarse de esto, la policía encargada del operativo de seguridad intentó dispersar a los violentos con balas de goma.
Todo pasó a mayores cuando cerca de un banco de suplentes cayó una bomba de estruendo, por lo que se detuvo momentáneamente las acciones. Luego de eso, Nicolás Kresta, árbitro del partido, decidió suspenderlo debido a que no contaba con garantías de seguridad. Pese al operativo policial, no había más precisiones de que esto no volvería a pasar. Mientras se suspendía, la violencia continuaba y ambos planteles debieron salir a refugiarse a sus vestuarios.
En un principio, se supo que alrededor de 15 personas fueron heridas por los disparos, se desconoce si son todos barrabravas o hay también civiles. Las ambulancias trataron de moverse rápido y trasladaron a un grupo al Hospital Municipal Nuestra Señora de Luján, mientras otros fueron derivados a la Clínica Güemes. Otras cuatro personas resultaron heridas por las balas de goma disparadas por la policía.
Reacciones
Las tristes imágenes se viralizaron rápidamente en redes sociales y generaron todo tipo de reacciones, no solo de los usuarios, sino también de los clubes. Leandro N. Alem, publicó un mensaje en redes sociales. En el mismo afirma: "Lamentablemente se suspendió el clásico por incidentes. Queda opacado por un grupo de violentos lo que tendría que ser una fiesta del fútbol".
Por otro lado, Horacio Fabregat, entrenador del equipo de General Rodríguez, habló con el mencionado medio y contó como estaban viviendo la situación dentro del estadio. "Estamos adentro del vestuario, no tenemos forma de salir porque no tenemos micro y estamos esperando de qué forma nos vamos a ir a casa. Los dirigentes están con nosotros y la gente de Luján está viendo cómo nos podemos ir", reveló
"Yo fui el primero que vi que estaba pasando algo, llamé al cuarto árbitro y le pedí que pare el partido. A partir de ahí nos pidieron que nos metamos adentro de la cancha, nos empezaron a tirar piedras y cayó una bomba de estruendo muy cerca del banco. Sé que fue algo grave lo que pasó afuera, pero no sabemos quién qué sucedió", concluyó el director técnico.