Esta semana se conoció una nueva subasta que venderá una reliquia que perteneció a Diego Armando Maradona. Esta vez será el Balón de Oro que recibió en 1986 como mejor futbolista del Mundial de México, cuando la Selección Argentina se consagró campeona del mundo por segunda vez en su historia. Sin embargo, ese trofeo tiene una historia muy particular que incluso lo hace más deseable por los grandes millonarios del mundo.
Ese trofeo que recibió el Diez fue robado por la mafia italiana en 1989 y fue encontrado recién en el 2016 de casualidad por un coleccionista franco-argentino. Como la primera versión era que había sido derretido para venderse el oro pasaron ocho años de estudios y pruebas hasta que se verificó su autenticidad.
Finalmente la casa de subastas Aguttes, en París, logró verificar que el trofeo era real y este martes anunció que el próximo 2 de junio comenzará la subasta donde la casa encargada de la venta espera recaudar alrededor de 15 millones de euros.
La casa de subastas, en su página web, exhibe el premio y cuenta algunos detalles. Por ejemplo, que está hecho de aleación de cobre dorado con inclusiones negras que dicen "Azteca", nombre que tuvo la pelota que se utilizó durante el Mundial 86.
En cuanto a las medidas, informa que tiene un alto de 28 centímetros, un diámetro de 15,8 cm y que pesa 4 kilos. Además de citar algunos detalles como rastros de roces, rayones y la falta de la placa de identificación.
La tremenda historia del Balón de Oro que ganó Maradona en el '86:
Luego de ganar el Mundial con la Selección Argentina, Maradona fue elegido como el mejor jugador de la Copa del Mundo y se le entregó el Balón de Oro de Adidas, en una ceremonia realizada por France Football en el Lido de París. Allí, Gary Lineker recibió el Botín de Oro por haber sido el goleador del certamen e Igor Belanov, que jugaba en el Dinamo de Kiev, se llevó el Balón de Oro al mejor jugador del año ya que en ese entonces el premio era sólo para futbolistas europeos.
Diego eligió el Banco della Provincia de Nápoles para guardar su trofeo junto a una colección de relojes, que eran su debilidad, y otras joyas personales. Pero el 26 de octubre de 1989, la mafia italiana, más precisamente el clan de Giuseppe Misso, realizó un impactante asalto en el banco y dentro del multimillonario botín robado figuraban las pertenencias del jugador argentino. Cuenta la historia que Maradona se contactó con los capos de la camorra napolitana para pedir la devolución de su Balón de Oro, pero sólo pudo recuperar algunos relojes y objetos de valor.
Salvatore Lo Russo, capo de la mafia de Nápoles, contó años después en el interrogatorio por un juicio por tráfico de drogas que el Balón no pudo ser recuperado porque cuando a pedido de Diego fue a gestionar su devolución, los ladrones ya lo habían fundido para venderlo luego como lingotes de oro. Aunque también hubo otra versión: que el trofeo había sido perdido en una partida de póker.
La cuestión es que en enero del 2016, Abdelhamid B, un franco-argentino y ex galerista, anunció que había encontrado el Balón de Oro ganado por Maradona en el 86. Sin embargo, recién el pasado 2 de abril, la casa de subastas Aguttes logró verificar que el trofeo era auténtico. Y este martes anunció que el próximo 6 de junio será finalmente subastado.
Según cuenta Infobae, la ley francesa considera a Abdelhamid B. como el legítimo propietario del Balón de Oro ya que argumenta que lo adquirió de buena fe, sin saber que había sido robado. Por su parte los legítimos propietarios (los herederos de Maradona) no podrán reclamarlo ya que no lo hicieron en un plazo de tres años desde que fue vendido.
