Casi tres semanas después del enfrentamiento ante Belgrano, por la segunda fecha de la Liga Profesional, River regresó a Córdoba este martes para jugar el desempate del Trofeo de Campeones 2020 con Banfield.
Allí, en la previa de lo que será el encuentro en el estadio Mario Alberto Kempes, el Millonario fue recibido por una gran cantidad de hinchas cordobeses que siempre suelen armar un lindo escenario a puro festejo y color. Sin embargo, el plantel que dirige Martín Demichelis terminó llegando un poco más tarde de lo pensado al hotel y la noche no terminó de la mejor manera, con muchos simpatizantes enojados y desilusionados.
Los hinchas se comenzaron a juntar a primeras horas de la tarde y se quedaron en el lugar hasta la llegada del plantel. Pero resulta que la delegación llegó al hotel y se fue directo a cenar, postergando así el encuentro con los simpatizantes. Luego, recién pasadas las 22:30, los jugadores salieron a saludar, aunque todo a distancia, con un tibio agradecimiento con las manos hacia arriba.
No hubo fotos, ni autógrafos. Algunos esperaban desde las 4 de la tarde. Incluso, en el momento en el que notaron que no iban a acercarse, se vivió un momento tenso: reproches, algún que otro insulto y hasta cánticos por Marcelo Gallardo en la puerta del hotel.
Según relató TyC Sports, solo pocos referentes como Franco Armani, Jonatan Maidana y Nacho Fernández se acercaron hasta abrazar y saludar a unos pequeños simpatizantes que gritaban desde lejos.
La supuesta justificación de River por el mal momento con los hinchas:
Lo cierto es que desde La Banda argumentaron que había pocos policías en la zona, lo que podía generar un desborde de gente sobre el vallado principal.
Sin embargo, más tarde, el periodista Gustavo Yarroch reveló: "No había riesgo de disturbios. La seguridad manejaba las cosas con orden". Mientras que Javier Gil Navarro contó lo que le informaron desde el club: "Se habla de falta de luz en el lugar y de un piso desparejo, que ponía en riesgo a los jugadores".