Lamentablemente el racismo continúa presente dentro del fútbol a lo largo de todo el mundo. Con casos muy recordados como la ocasión en la que a Dani Alves le arrojaron una banana, hay un sinfín de maltratos a diversos futbolistas dentro del campo de juego. Esto ha hecho que la FIFA como así otras entidades de este deporte repudien el racismo y lancen campañas en su contra para concientizar no solo a los hinchas, sino también a los propios futbolistas. Sin embargo, aún persisten las acciones racistas en el fútbol y esto preocupa.
La jornada de ayer en La Liga de España no fue la excepción. En el partido en el que el Valencia venció por 1-0 al Real Madrid, la noticia fueron los insultos racistas hacia Vinicius Júnior antes y durante el partido. El futbolista brasileño con gran presente en el Madrid terminó siendo expulsado por agredir a un rival, y al final del encuentro dejó una frase que resonó en el mundo del fútbol: "Un país que amo y que ahora es conocido como un país de racistas". En este contexto, Luiz Inácio Lula da Silva, presidente de Brasil, se manifestó para defender a su compatriota y pidió medidas a la FIFA contra el racismo.
El fuerte mensaje de Lula da Silva defendiendo a Vinicius contra el racismo
Después de los insultos racistas que recibió Vinicius en España, el presidente de Brasil se manifestó al respecto defendiendo a su compatriota y pidiendo medidas duras a la FIFA: "Quería tener un gesto de solidaridad con Vinicius, un joven que sin duda es el mejor jugador del Real Madrid, y que sufre reiteradas agresiones. Espero que la FIFA y otras entidades tomen medidas para evitar que el racismo se apodere del fútbol", expresó Lula mediante la red social Twitter.
Respecto a esta misma situación, el Ministerio de Igualdad Racial de Brasil anunció mediante sus redes sociales que notificará a las autoridades de La Liga por estas nuevas agresiones racistas contra Vinicius Júnior. En Twitter la institución aseguró que "no tolerará el racismo" y que trabajará para que "todo deportista brasileño negro pueda practicar su deporte sin experimentar violencia".
Además, el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, también se solidarizó con el futbolista brasileño del Real Madrid: "Toda nuestra solidaridad con Vinicíus. No hay lugar para el racismo en el fútbol ni en la sociedad, y la FIFA apoya a todos los jugadores y a todas las jugadoras que lo han sufrido en carne propia".
