Luego de ser declarado culpable por violencia de género a raíz de la denuncia que efectuó su expareja, Daniela Cortés, el presente deportivo de Sebastián Villa cambió por completo. El colombiano fue sentenciado a dos años y un mes de prisión pero que, al ser una pena menor a tres años, no deberá ir preso.
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Tras conocer el veredicto final, el cuál todavía tiene que ser ratificado, inmediatamente el delantero decidió armar las valijas y marcharse a Colombia para estar cerca de su familia, algo que al parecer nunca fue consensuado con el club de La Ribera. Pero eso no fue todo porque cuando menos se sabía del paradero de Villa, el futbolista decidió intimar al Xeneize para volver a ser incorporado al plantel profesional en un plazo no mayor a cinco días. De lo contrario, el jugador se iba a declarar como agente libre para tener el pase en su poder y tener la posibilidad de firmar contrato con cualquier otro club interesado en sus servicios.
Ante esto, Boca le respondió en tiempo y forma a Villa y tomó una postura contundente sobre el futuro del colombiano: rechazaron la carta documento que se les presentó y dieron motivos concretos para mantener al colombiano apartado del plantel, incluso amparándose en el marco legal para proteger los intereses de la institución. Por el momento, la postura del club sigue firme: No volverá a entrenarse ni jugar con la camiseta azul y oro.
La postura de Boca con Sebastián Villa:
En las últimas horas, el Departamento Legal del club rechazó la carta documento de Villa y contestó que la decisión de separarlo del plantel profesional fue por parte del entrenador, Jorge Almirón. Incluso, aseguraron que el deportista no estaba autorizado por la dirigencia a viajar a Colombia.
Entonces, tras recibir la intimación del jugador, Boca le exigió a Villa que regrese a la Argentina y se entrene en el club, aunque sea separado del plantel profesional. Según expresó TN, en la carta documento le deja en claro que nunca estuvo autorizado a viajar a Colombia y que no está cumpliendo con su contrato profesional.
“Villa quiere quedar libre pero no lo vamos a permitir. El pase es de Boca. Una cosa es que no entrene con el plantel, pero tiene que cumplir con su obligación de seguir entrenando en el club”, le explicaron al mismo medio desde la intimidad del Xeneize. Para el club, Villa está en falta.
Villa había llegado al fútbol argentino en junio del 2018, procedente de Deportes Tolima de Colombia, a cambio de una suma cercana a los 3 millones 500 mil dólares por el 70 por ciento de su pase. En febrero de 2021, cuando ya había sido denunciado por violencia de género por su ex pareja, el club le renovó contrato hasta diciembre de 2024. Es decir, que las partes tienen un vínculo por delante de un año y medio.
Es por eso que Boca intentará de todas formar cuidar su patrimonio y no perder el pase del futbolista, quién pretende quedar libre para poder negociar con cualquier club fuera de la Argentina. De llegar a un acuerdo con el jugador, el club buscará cederlo a préstamo o transferirlo durante el mercado de pases que se abrirá en las próximas semanas y recuperar algo de lo invertido hace cinco años.
Cabe recordar que Villa todavía tiene un juicio pendiente por “abuso sexual con acceso carnal”, un delito que prevé una pena de 15 años de prisión, a raíz de la denuncia que efectuó Tamara Doldán. De ser declarado culpable, el colombiano podría terminar en la cárcel.
