Las ediciones de Gran Hermano se han caracterizado por darle a los participantes diferentes beneficios. Uno de estos es que ellos elijan que comida comerán durante toda la semana. Sin embargo, la misma no es regalada o ilimitada. De hecho, tienen un presupuesto y tiempo definido para hacer las compras en un supermercado que está dentro de la casa. Allí, todos planean y ven qué es lo que falta en la casa, para definir qué tienen que comprar en la visita al super.
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En esta edición han faltado diferentes productos, se han olvidado de ciertas compras y esto llevó a varios problemas. Entre los propios participantes se recriminaron la falta de algunos productos y también se ha escondido comida. Sin embargo, también ha habido tiempo para las risas y en medio del acotado timing que tienen para realizar las compras, varias situaciones insólitas se vivieron. Ahora, Julieta Poggio y Daniela Celis son protagonistas de una verdadera discusión inentendible.
La insólita discusión entre Daniela y Julieta por el peso de la comida.
Las dos participantes fueron al confesionario para hablar con Gran Hermano y hacerle un pedido de carne. Ambas estaban enviadas con instrucciones de Romina Uhrig, pero dentro del lugar, se vivió una insólita situación por el pedido."¿Cuánto es un pollo entero?", preguntó Julieta. Sorprendida, Daniela le respondió: "Nos pidió un pollo. Así que les compramos un pollo y que sean los kilos que sea. Pidámosle un pollo y que ellos después saquen la cuenta".
Fue allí cuando Julieta inició con una explicación que de racional tenía muy poco. "No es así. La bondiola puede ser más pesada y no alcanza para todos, pero la otra son todas chiquititas y alcanza para todos". Daniela si entendía que el peso siendo un kilo o dos, por más que sea de diferente producto, es lo mismo. "Pero es por kilo, es lo mismo. ¡El kilo es el mismo!", le explicaba a su compañera.
Claramente, Poggio no terminaba de entender nada de esta explicación y seguía explicando su parecer: "¡No! porque un bife de chorizo obviamente pesa más que una nalga". Ya entre molesta y con risas, Daniela aseguró: "Pero un kilo es igual que un kilo". Para evitar continuar la discusión, Julieta dejó que todo siga su curso, pero no entendió la explicación de pesos que le dio su compañera.
